Vida de perro: La historia de Ernesto Tamayo Osorio, un excombatiente cubano en Angola

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Ernesto Tamayo Osorio, un excombatiente de la invasión militar cubana en Angola, vive una vida de penurias en las calles de Holguín, Cuba, sin recibir la ayuda del gobierno al que sirvió en la contienda. A sus 61 años, Tamayo sufre las secuelas físicas de la guerra, y su historia es un triste testimonio de la situación de muchos excombatientes cubanos olvidados por el gobierno cubano, señala un reportaje de Cubanet Noticias.

Durante su participación en la guerra en Angola, Tamayo sufrió heridas graves en las piernas y el brazo izquierdo. Sus lesiones fueron tan severas que una de sus piernas tuvo que ser reconstruida con la ayuda de varillas metálicas. Como resultado de estas heridas, Tamayo depende de un bastón para poder caminar.

A pesar de sus sacrificios y lesiones sufridas en servicio del gobierno cubano, a su regreso a Cuba, se encontró con la desatención por parte de las autoridades. Aunque se le prometió un retiro, pasó más de dos meses sin recibir ninguna asistencia. Actualmente, sobrevive con una pensión mensual de apenas 1,500 pesos cubanos, una cantidad insuficiente para cubrir sus necesidades básicas debido a la creciente inflación en el país.

Tamayo expresó su descontento con el gobierno, afirmando que la ayuda que recibe del Estado es lamentablemente insuficiente. Además, denunció que las instituciones estatales que deberían brindar asistencia en casos como el suyo lo han ignorado. A pesar de sus intentos de buscar ayuda gubernamental, finalmente desistió debido a la falta de respuesta y a la sensación de que estaba siendo evitado por las autoridades.

El excombatiente cubano recordó su participación en la batalla de Cuito Cuanavale en Angola, una de las operaciones más cruentas de la guerra. A pesar de sus sacrificios y promesas de ayuda por parte del gobierno, se encuentra sin un hogar y depende de la generosidad de personas y organizaciones no gubernamentales, como la iglesia, para poder comer.

La historia de Ernesto Tamayo Osorio es solo un ejemplo de la difícil realidad que enfrentan los excombatientes cubanos en la actualidad. Muchos de ellos, a pesar de sus sacrificios y contribuciones pasadas, se ven desatendidos y luchan por sobrevivir en condiciones precarias.

En Holguín también vive Julián Hidalgo Expósito, un anciano excombatiente que sobrevive comiendo sobras de la calle en Holguín; otro ejemplo de esta difícil realidad. Y en el municipio de Antilla, también en Holguín, vive un combatiente del Ejército Rebelde y fundador del PCC de la provincia, quien fue visto en un video denunciando el abandono del gobierno local del municipio de Antilla ante su delicado estado de salud.

En septiembre de este año, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos publicó en su cuenta de Twitter un video que refleja claramente la situación en que viven algunos de esos ex combatientes de la Revolución.

Son ancianos cubanos que son ex combatientes de la guerra de Angola se encuentran desamparados en las calles de Cuba, denunciando que el gobierno los ha abandonado.

Dos de estos ex combatientes, sin hogar ni pensiones dignas, se ven obligados a recolectar latas en las basuras y calles para poder sobrevivir. Uno de ellos, de 68 años, mostró sacos llenos de latas y lamentó la falta de atención de los servicios sociales y la ausencia de un hogar.

El otro ex combatiente, que marchó a Angola en 1989, cuando su hija tenía cuatro meses, también se encuentra en condiciones precarias. A pesar de su servicio en la guerra, no recibieron ninguna pensión de combatiente al regresar.

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El pasado mes de octubre fue divulgado otro video, en el que se ve a un anciano cubano comiendo hojas de las plantas de un jardín debido a su extrema hambre y falta de comida. La desgarradora escena tuvo lugar en La Habana, pero refleja una creciente crisis en Cuba, donde más ancianos y personas vulnerables luchan por sobrevivir en condiciones de extrema pobreza.

Una mujer que pasaba por la calle se sorprendió al ver al hombre comiendo hojas y le preguntó si eran comestibles. El anciano respondió que lo hacía porque tenía hambre y no tenía dinero para comprar alimentos. A pesar de la preocupación de la mujer por su salud, él insistió en que no tenía otra opción debido a su falta de recursos.

El hombre mencionó haber pasado 27 meses en Etiopía durante la guerra.

El conmovedor video fue compartido en el perfil de Facebook del usuario Despierta cubano, y destaca la difícil realidad que enfrentan muchas personas mayores y vulnerables en Cuba debido a la escasez de alimentos y recursos básicos, entre los que se encuentran cientos de ancianos ex combatientes que actualmente se sienten abandonados por la Revolución.

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