En medio del secretismo oficial de La Habana ya esta semana estuvo en la Isla una delegación del Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Sur para explorar dónde abrirán de inmediato una misión diplomática temporal en la antesala de la apertura de su Embajada más adelante.
Corea del Sur y Cuba acordaron abrir misiones diplomáticas en los respectivos países , dijo este domingo la Cancillería en Seúl, como paso de seguimiento al establecimiento de sus relaciones diplomáticas en febrero pasado.
El gobierno cubano no hizo público esta visita. El discreto perfil al parecer evita molestar más a su histórico aliado de Corea del Norte que ha reducido al máximo en su prensa oficial notas referidas a Cuba.
El último reporte en el Rodong Sinmun, el órgano del Partido Comunista en la RPDC -único permitido en ese país al igual que en Cuba- data del 19 de marzo para registrar la visita de despedida que realizara su embajador, Ma Chol, al gobernante cubano Miguel Díaz Canel, un mes después del sorpresivo anuncio de las relaciones entre Seúl y La Habana.
La delegación surcoreana, encabezada por Song Si-jin, director general de planificación y gestión del Ministerio de Asuntos Exteriores, visitó La Habana del miércoles al sábado y discutió los esfuerzos para abrir las misiones con funcionarios cubanos, se dijo en un comunicado.
«Los dos países acordaron establecer embajadas permanentes en Seúl y La Habana, respectivamente, e intercambiaron cartas diplomáticas confirmándolo», confirmó el ministerio.
Sobre la base del acuerdo, el gobierno planea establecer una misión temporal en La Habana y enviar diplomáticos como paso intermedio antes de establecer una embajada permanente. No trascendió dónde estaría instalada esta oficina aunque se especula que pudiera estar ubicada en el Centro de Negocios de Miramar (conocido como Miramar Trade Center) o en el Edificio de la Lonja del Comercio, en el Centro Histórico de La Habana.
«Cerca de la embajada de Corea del Norte no va a estar» bromeó uno de los pacientes que esperaban ser atendidos en el cuerpo de guardia del Instituto de Cardiología de El Vedado, cercano a la legación norcoreana en la céntrica Avenida Paseo, que conduce al malecón habanero.
El pasado 14 de febrero Corea del Sur y Cuba hicieron el anuncio sorpresa sobre el establecimiento de relaciones diplomáticas, en Nueva York, «en un aparente duro golpe a Corea del Norte que ha promocionado vínculos «fraternales» con La Habana escribió desde Seú la agencia Yonhap.
Según la Oficina de Seguridad Nacional, el acuerdo secreto se alcanzó durante las vacaciones del Año Nuevo Lunar del año pasado y se informó inmediatamente al presidente Yoon Seok-yeol, quien lo presentó a la reunión del Gabinete el 13 del mismo mes como un acuerdo cerrado. Punto del orden del día y aprobado. Se llevó a cabo en extremo secreto, consciente de la relación entre Cuba y Corea del Norte, escribió el medio local «Noticias Financieras».
Según esa Oficina, dado que Cuba es un país que estableció una «relación de solidaridad fraternal» con Corea del Norte a través de un tratado de amistad en marzo de 1986, el establecimiento de relaciones diplomáticas y seguramente será «un golpe político fatal para Corea del Norte», ya que destruye su confianza en su aliado más confiable y confirma su aislamiento de la comunidad internacional.
Analistas sudcoreanos estiman que la crisis económica en la Isla agudizada tras la pandemia de Covid-19 obligó a La Habana a las relaciones con Seúl «independientemente de la ideología».
Sin embargo, según la Oficina de Seguridad Nacional, el comercio con Cuba sólo vale unos 20 millones de dólares, ya que el pago debe realizarse a través de un tercer país debido a las sanciones estadounidenses, recordó la publicación. En su encuentro con el embajador Ma Chol, Díaz-Canel, expresó su voluntad de avanzar continuamente en sus tradicionales vínculos socialistas y transmitió un mensaje de amistad al dictador norcoreano, Kim Jong-un. No quedó claro si el regreso de Ma, en Cuba desde 2018, era una transferencia de rutina o una decisión afectada por la nueva movida de sus socios cubanos a ritmo de K-Pop