Mientras esperaba en México la cita CBP One para entrar a Estados Unidos, un cubano fue asesinado este jueves en la frutería en la que trabajaba en Cancún.
Según denunció su exesposa y madre de su hijo, que se identifica en TikTok como Alexia, Adachi Veranes Maren, natural de El Caney, Santiago de Cuba, fue apuñalado por otro inmigrante, que al parecer era su compañero de trabajo y no cubano.
Alexia aseguró que su expareja llevaba dos años en México y que no sabe cómo ha podido pasar algo así porque era un hombre tranquilo y trabajador, y un padre “siempre presente” y “preocupado”.
“Una persona le ha quitado la vida. El que lo mató, lo mató de gratis”, dijo antes de expresar que “a veces la muerte está donde menos te lo imaginas”.
La propia cubana afirmó que mucha gente “ahora mismo está sufriendo su muerte”, para responder al comentario de un internauta que insinuó que el asesinato se debió a que los cubanos siempre están “haciéndose los guapos”.
Dailin Mojica, la esposa actual de la víctima, ratificó a través de Facebook que Veranes Maren, de 44 años, era “un hombre trabajador, que no andaba metido en pleitos y se llevaba muy bien con sus compañeros”.
A tenor con Mojica, la muerte del cubano no tuvo que ver con “pelea ni riña de ningún tipo” ni tuvieron lugar fuera de la frutería, como relataron varios medios locales. Nunca tuvo “conflictos” dentro o fuera del trabajo, sino que fue atacado por un “muchacho” que “lamentablemente no estaba en sus cincos sentidos”, acotó.
“Los hechos ocurrieron dentro de las instalaciones de la frutería y en ningún momento hubo pelea”, subrayó Mojica, también de Santiago de Cuba, que estuvo presente cuando su pareja fue herida “en la espalda por el hombro izquierdo”.
Mojica precisó que “enseguida se llamó al 911, pero él cayó al piso perdiendo el conocimiento”. “Lo cargamos y lo sacamos afuera pidiendo auxilio, pero se debía esperar la ambulancia”, agregó.
La santiaguera detalló que el asesino ya “se agarró” y “está en manos de la fiscalía mexicana”; y que “se está haciendo todo tipo de gestión por parte de la empresa para enviarlo a Cuba para despedirlo como él se merece”.
Tras lo ocurrido, Alexia lamentó la vida del emigrante porque “es lo más grande y lo más cochino que hay”. “Había emigrado desde Cuba, pese a que en Santiago vivía bien y tenía su moto. Tenía todas las condiciones, pero buscando siempre un futuro mejor decidió irse de Cuba”, apuntó afectada por la muerte de su exmarido.
