En un llamado emotivo y directo, un grupo de mujeres ucranianas ha emitido un mensaje en español dirigido a los ciudadanos de América Latina, especialmente a aquellos cubanos que están en Rusia o que consideran emigrar allí.
El mensaje, claro y contundente, advierte sobre los peligros y las consecuencias de unirse al conflicto militar en Ucrania bajo el reclutamiento del ejército ruso.
Las mujeres, hablando en un español aprendido por la fuerza de las circunstancias, no como elección sino como necesidad durante su desplazamiento forzoso por la guerra, expresaron su preocupación por la seguridad y el bienestar de los inmigrantes latinos – especialmente cubanos – que podrían verse tentados o coaccionados a participar en el conflicto.
En el video divulgado, las mujeres ucranianas subrayaron que desde la invasión de Ucrania por Rusia, ciudades enteras han sido devastadas, y la vida en muchas áreas se ha convertido en una lucha diaria contra la violencia de los ataques rusos.
El mensaje destaca la manipulación por parte del Ministerio de Defensa ruso, que según ellas, recluta a los más vulnerables entre los emigrantes, ofreciéndoles compensaciones financieras y ayuda con la documentación a cambio de servir en la guerra. Las mujeres advierten que estos reclutas a menudo son tratados como desechables en el frente, con un alto riesgo de no regresar.
Las mujeres ucranianas apelan a la solidaridad y los lazos históricos de amistad y cooperación entre Ucrania y Cuba, recordando actos de apoyo mutuo como la ayuda de voluntarios cubanos en Chernobyl, el tratamiento médico de niños ucranianos en Cuba y la formación educativa de ingenieros cubanos en Ucrania.
Con frases repetidas como «No vayan a la guerra», las mujeres imploran a los oyentes que consideren las graves implicaciones de involucrarse en el conflicto, tanto para ellos mismos como para sus familias. Subrayan que los soldados ucranianos están defendiendo su patria y no dudarán en proteger su país con vehemencia.
Este llamado busca resonar en los corazones y las mentes de aquellos que, en busca de oportunidades o bajo coacción, podrían encontrarse en medio de una guerra que no es la suya. Es un recordatorio poderoso de que las decisiones tomadas en momentos de desesperación pueden tener consecuencias profundas y duraderas no solo para los individuos sino también para las relaciones internacionales.
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