La muerte de El Taiger ha dejado una huella profunda en el tráfico digital y en la producción de contenido mediático. Mientras sus fanáticos lamentan su partida, los medios digitales han visto cómo sus métricas se disparan gracias al interés generado en torno al artista. La cultura del clic, alimentada por tragedias, muestra una vez más su lado más sombrío, donde el dolor y la pérdida se traducen en ganancias para quienes producen contenido
Durante su participación en la guerra en Angola, Tamayo sufrió heridas graves en las piernas y el brazo izquierdo. Sus lesiones fueron tan severas que una de sus piernas tuvo que ser reconstruida con la ayuda de varillas metálicas. Como resultado de estas heridas, Tamayo depende de un bastón para poder caminar.
Gracias a la ayuda de extraños que le compraban comida, pudo sobrevivir. A cambio del gesto Singh les regalaba deliciosas pláticas sobre sus creencias budistas e hindúes sobre la curación.