Un grupo de pandillas juveniles ha implantado el terror en Santiago de Cuba según reconoció en una reunión con pobladores de la ciudad el Ministerio del Interior (Minint).
Las pandillas están compuestas por jóvenes armados con cuchillos y machetes y han provocado sonados hechos de violencia en esa ciudad.
Uno de estos sucesos ocurrió en una cafetería que fue asaltada por estos criminales organizados en grupos. En el hecho un empleado recibió heridas leves y a un cliente “le amputaron la mano derecha” cuando trataba de escapar de los delincuentes armados.
El activista cubano, Yosmani Mayeta Labrada, radicado en Washington, Estados Unidos, quien divulgó un video de la reunión, señaló que la persona víctima de la grave agresión es un liniero de la empresa eléctrica santiaguera identificado como David Enrique Perdomo Álvarez. Tras el hecho un grupo de amigos músicos le dedicaron un tema que pide el cese de la violencia en la provincia.
El oficial dijo que ya detuvieron e interrogaron a cinco de los agresores, los cuales, aseguró, comparten esa conducta violenta con otros pandilleros de la provincia, a quienes tienen identificados y “hacia ellos vamos a ir”.
“No se nos pueden seguir dando este tipo de hechos. Vamos a actuar severamente. Serán sancionados, tengan confianza», aseveró.
En la reunión habitantes de la localidad interrumpieron al oficial para narrar diferentes hechos de violencia acontecidos con sus familiares.
Una mujer indicó que ya no confiaba en la policía porque su hijo, al que le falta una pierna y es profesor universitario, fue agredido por dos personas encapuchadas.
“Le pusieron una sábana arriba, lo amarraron por el cuello y lo halaron en la puerta de su casa”, dijo.
La violencia en Cuba ha alcanzado niveles desproporcionados a medida que se ha agravado la crisis económica y en varias provincias y municipios del país las personas tratan de no salir de noche para preservar la vida y no ser víctimas de asaltos u otro tipo de situaciones violentas.
Los policías han pedido mayor equipamiento para enfrentar esta ola criminal en diferentes actos públicos y los cubanos exigen a las autoridades que frenen esta escalada de violencia que azota toda la isla.
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