¿Plato gourmet? Filete de claria a 260 pesos

Havana
algo de nubes
22.2 ° C
22.2 °
22 °
73 %
3.6kmh
20 %
Sáb
30 °
Dom
30 °
Lun
30 °
Mar
29 °
Mié
26 °

Los precios de los alimentos en el sector privado son motivos de preocupación y burlas al mismo tiempo entre la mayoría de los cubanos por lo impagable y por la ofensa que significa para la población de a pie.

Las mipymes y otros negocios privados son los únicos que venden carnes, pollos y otros alimentos cada vez más inexistentes en las bodegas cubanas. Un ejemplo digno de cualquier ejercicio del mejor humorista es el precio que cuesta la libra de claria en un negocio privado de Nuevo Vedado. 260 pesos es el costo de  este pescado de dudosa reputación como si se tratara de un alimento destinado a los paladares más exquisitos.

El precio de la claria en ese establecimiento es seguramente el mismo valor que tiene en otras instalaciones de este tipo o tal vez mayor, porque nadie sabe a ciencia cierta a qué responden los precios del mercado privado, más allá de la consabida inflación.

La tablilla afuera del local es además, muy reveladora. El paquete de 10 libras de pollo en 2500 CUP, Jamón a 550 pesos la libra, y el picadillo de res condimentando a 410, entre otras perlas.

Cuballama comprobó que aproximadamente en dos horas entró una sola persona al local que se fue, por cierto, con las manos vacías. Esto pudiera ser un indicador de la poca capacidad de compra de un sector -nada despreciable- de la población y hace pensar sobre el estado de estos alimentos y el tiempo que pueden haber permanecido en el establecimiento en un país de constantes apagones, más aún tratándose de alimentos que necesitan refrigeración como es el caso del pescado.

Por otro lado hay negocios de este tipo que sí venden a manos llenas porque están ubicados en repartos habitados por la creciente clase media cubana cuyas ganancias proceden de los negocios privados, de remesas del exterior o de otros emprendimientos dentro y fuera de Cuba.

Como se sabe, los cubanos bromean hasta en las situaciones más difíciles, un rasgo que de alguna manera los ha llevado a enfrentar (y aguantar)  tantos años de penurias y dificultades de todo tipo. De ahí que cuando uno de nuestros periodistas se acercó a fotografiar la tablilla le espetó un hombre de unos 50 años. “Esa claria por lo menos sabe a langosta”, dijo y las risas fueron replicadas por todos los que pasaban por esa esquina de Nuevo Vedado.

¿Quieres reportar algo?

Envía tu información a: [email protected]

Lo más leído

Quizás te interese

Envíos a CUBA desde → $1.89 x LBENVÍA AQUÍ
+