La tienda La Puntilla, ubicada en el municipio capitalino de Playa, ha destapado las críticas entre sus clientes al vender turrones de yema vencidos entre sus ofertas.
A pesar de que su fecha de vencimiento está fijada a principios de octubre estos productos se siguen ofertando en las estanterías de la instalación que vende en Moneda Libremente Convertible (MLC).
“Este tipo de turrones se hacen a base de huevo por lo que puede ser un poco peligroso que se vendan tras la fecha estipulada de su vencimiento. No sé cómo no lo retiran”; dijo a Cuballama Noticias un usuario de la tienda.
Otro cliente le preguntó a una de las trabajadoras del local por qué se siguen vendiendo los turrones en esas condiciones pero solo atinó a responder que era «una orientación».
El producto bajo su precio a menos de 2 mlc pero la mayoría de los clientes duda en comprarlo por temor a que esté en malas condiciones.
“Tenían que haber bajado su precio antes que se venciera no ahora que su consumo puede traer problemas pero así son las cosas en este país”, dijo otra cliente.
Las tiendas MLC tras su apertura que destacaban por estar bastante surtidas pero ahora sufren un gran desabastecimiento y apenas se pueden encontrar productos como carne, queso o confituras entre muchos otros.
Alejandro Gil, ministro de Economía Planificacion , dijo en 2022 que “de no haber existido las tiendas en monedas libremente convertibles (MLC) la situación económica del país sería más compleja aún”.
Aseguró igualmente que de las ventas en esos establecimientos se habían utilizado más de 300 millones de dólares para abastecer de mercancías la red del comercio en moneda nacional y que la entrada en vigor de esos establecimientos era una medida de “ justicia social”.
Sin embargo la crisis económica en Cuba se ha acentuado y las personas carecen de muchos alimentos básicos en su dieta cotidiana y el estado no ha podido siquiera asegurar los productos de la canasta básica