La cantante Amaia Montero aparentemente enfrenta problemas de salud. Acrecentados, dicen fuentes cercanas, desde la muerte de su padre en el año 2009.
¿Peor que la foto anterior? Al menos así lo creen muchos. La nueva foto de Amaia Montero que circula por las redes tiene aún más preocupados a sus fans y a los de La Oreja de Van Gogh.
Se sabe ahora que Amaia Montero estuvo internada todo un mes; y que ha salido. Pero, ¿en qué estado?
La foto que circula, aparentemente, fue tomada después de su salida del centro en el que estuvo recluída.
Una cronología de los hechos nos lleva a esta imagen.
¿La recuerdan?
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Peor aún que aquella foto era el mensaje dejado por ella.
“¿Si la esperanza es lo último que muere y todavía no la he perdido, de qué me sirve la vida?”, se leía en la publicación de la cantante vasca.
De aquella primera foto polémica, no queda mucho. La propia Amaia Montero la cambió por un vídeo en el que aparece ella cantando una de las canciones de su nuevo álbum. Cambió el título de la publicación y escribió “Marcadores a cero”, dando a entender que todo sería borrón y cuenta nueva. Que comenzaría de cero. Que se enfocaría en ser ella: Amaia Montero.
Aparentemente todo había sido un asunto de maquillaje.
En el año 2018, hasta se presentó en uno de sus conciertos supuestamente aparentemente ebria. Amaia, ese día, culpó a sus músicos del «desconcierto» y dijo que estaban tocado en una nota que no era.
Seguramente sí lo recuerdan todo. Esa es la foto que disparó una bala directamente contra un polvorín. Luego de publicarse, los medios, el público, y la llamada «social-media» se lanzaron en una carrera frenética por averiguar el paradero de la excepcional cantante.
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Poco se sabía y poco se dijo. Entre familiares y publicistas, nada claro salía a la luz, pero sus seguidores seguían presionando. Los medios intentando encontrar a Amaia Montero.
Presuntamente todos querían ayudarla.
Fue esa imagen, desalentadora, y su posterior desaparición pública, lo que más gasolina echó a la creciente llamarada. Sin embargo, pronto se lanzó un pedido de calma. Aparentemente Amaia Montero estaba viva; tenía seres queridos cerca que se estaban ocupando y preocupando por ella y eso, sobre todas las cosas, era lo que más importaba.
Su familia había advertido a mediados de noviembre, que Amaia “va mejor y está bien”. Se dijo que Montero, de 46 años de edad, se encontraba enfocada en su nuevo disco. Un álbum que planea lanzar próximamente.
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Lejos de «preocupación», se percibe un dejo de bullying. O al menos de comentarios no tan bien intencionados tras la aparición de esta nueva foto.
Ahora, Amaia Montero ha reaparecido y su imagen preocupa más a sus fanáticos. ¿Es ella? Sí, aunque no lo parezca. ¿Les importa a ellos como luce? No debería. ¿O sí?
Según se conoce ya, durante todo este tiempo la ex vocalista de La Oreja de Van Gogh estuvo internada en una clínica en Navarra, provincia de España.
Ni ella, ni sus seres queridos habían hecho ninguna declaración. Ella, aparentemente no estaba teniendo acceso a sus cuentas oficiales. Presuntamente para evitar que publicase otra foto, desde dentro de la clínica, y terminara por estallar una bomba mediática.
Pero como en este mundo, entre cielo y tierra no hay nada oculto, y la prensa española tiene todo el tiempo del mundo para hacer noticias, aparentemente un paparazzi o un fotógrafo de la revista Semana, se apostó fuera de la clínica a esperar por la salida de Amaia Montero.
La foto, nos muestra una imagen bastante desmejorada de la fenomenal cantante. Y por supuesto, otra vez los fanáticos han comenzado a preocuparse. A mal preocuparse incluso. A proferir palabras verdaderamente hirientes. Mal intencionadas.
Bien haría Amaia Montero en no pararle más bola a los miles de mensajes enfocados en su apariencia física. Aparentemente ese «bullying», que incluso pasa por ser «comentarios» en tono de «preocupación» por el modo en que luce, viste, o si está gorda o flaca; o si tiene la piel ajada, o seca, fue lo que la llevó al estado de desabandono que se podía percibir en aquella foto en blanco y negro; en la que Amaia Montero aparecía con el semblante serio y muy desaliñada.
Ahora, con la nueva foto, han vuelto sus fanáticos y seguidores a preocuparse por su salud. Y entre los que dicen «Preocuparse», están los llamados haters.