En una imagen que amenaza con volverse icónica para los aficionados al béisbol en Cuba y fuera de ella, Orlando «El Duque» Hernández, José Ariel Contreras y Aroldis Chapman, tres de los lanzadores cubanos más destacados de las últimas décadas y verdaderas leyendas del béisbol cubano, se han reunido, generando no solo emoción entre los fanáticos sino también sirviendo como un puente entre generaciones y estilos de pitcheo dentro de este deporte.
La foto de estas tres leyendas del béisbol cubano fue publicada por Chapman en su cuenta de Instagram, mientras pedía a sus seguidores un título para la foto.
Orlando «El Duque» Hernández, el mayor de los tres, es recordado por su excepcional carrera en las Grandes Ligas después de haber dejado una huella imborrable en el béisbol cubano, por sus victorias con los equipos de Industriales, Ciudad de La Habana y el equipo Cuba. En todos, llegó a ser la carta principal de pitcheo de los managers, entre los que destacan Jose M. Pineda y Jorge Fuentes, entre otras leyendas de la pelota cubana.
En la MLB, «El Duque» fue parte esencial de los New York Yankees, contribuyendo significativamente a las victorias del equipo en las Series Mundiales de 1998, 1999 y 2000. Su estilo único de lanzamiento, con ese pie levantado hasta la altura del pecho y su capacidad para desempeñarse bajo presión lo convirtieron en uno de los pitchers más respetados de su época.
Icónico es también, en su carrera, un out que sacó, lanzando el guante con la pelota «trabada» dentro hacia la primera base.
José Ariel Contreras, por su parte, también dejó Cuba para brillar en las Grandes Ligas.
Aunque jugó para varios equipos, fue con los Chicago White Sox donde Contreras dejó su marca más indeleble, siendo pieza clave en la conquista de la Serie Mundial de 2005. Este triunfo no solo significó el primer campeonato para los White Sox en 88 años sino que también consolidó a Contreras como uno de los grandes lanzadores cubanos en las mayores.
Sin embargo, los cubanos prefieren recordarlo por el juegazo que le lanzó a los Orioles de Baltimore en los que repartió diez ponches.
Aroldis Chapman, conocido por su impresionante velocidad de lanzamiento, ha seguido los pasos de sus predecesores, estableciendo récords y ganando campeonatos.
Conocido como «El Misil Cubano», Chapman ha jugado para varios equipos en la MLB, pero fue con los Chicago Cubs con quienes logró la cima del éxito en las Grandes Ligas, alzándose con el título de la Serie Mundial en 2016. Este triunfo no solo marcó el fin de una sequía de 108 años sin campeonatos para los Cubs sino que también demostró la evolución del béisbol cubano en las mayores.
Más allá de sus logros en la MLB, «El Duque», Contreras y Chapman comparten un origen común en las Series Nacionales de Cuba y en los Equipos Cuba, donde cada uno dejó su marca antes de dar el salto al béisbol profesional estadounidense.
Sus carreras en Cuba fueron el trampolín que los catapultó a la fama internacional, y sus actuaciones en eventos internacionales como el Clásico Mundial de Béisbol y las Olimpiadas siguen siendo recordadas con orgullo por los fanáticos cubanos.
La foto de estas tres leyendas del béisbol cubano, no es solo una imagen para el recuerdo; es un testimonio de la riqueza y el talento del béisbol cubano, así como de la capacidad de sus deportistas para sobresalir en los escenarios más competitivos del mundo.
Más significativo es el hecho de que el propio Chapman en una ocasión dijo que su ídolo en el montículo era José Ariel Contreras. Chapman había manifestado el deseo de cumplir un sueño y era reunirse alguna vez con el hombre que lo inspiró tanto. Un hecho que se concretó por primera vez en el año 2017.
A pesar de las diferencias en sus edades y trayectorias, Hernández, Contreras y Chapman comparten la experiencia única de representar a Cuba en el más alto nivel, uniendo sus historias en una sola fotografía que trasciende generaciones y celebra el legado cubano en el béisbol mundial.
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