Tiroteo en escuela de Texas: Entre armas, descaro e incompetencias

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Podrán decir lo que quieran, patalear, gritar y expulsar a Beto Rourke 500 veces y llamarlo comunista si les da la gana, pero ¿cómo se asume que el gobernador de un estado diga una cosa, con su cara, hoy, sobre la muerte de 21 personas inocentes a manos de un individuo armado y planifique ir con la misma cara, par de días después a recaudar fondos para la Asociación Nacional del Rifle? ¿Cómo puede decir que el tiroteo ocurrido en la escuela de Texas guarda relación con el trabajo del estado en la salud mental, cuando el mismo gobernador, meses antes, no solo le cortó $211 millones de dólares al estado precisamente sobre ese trabajo, sino que además aprobó una controvertida ley que prácticamente le puso en la mano un arma hasta a Chicho el Cojo? Sí, Chicho el Cojo, el que vive en Texas.

Es mucho el descaro y la doble moral del Gobernador de Texas. Bien por Beto Rourke, por plántarsele bonito y ripiarlo delante de todo el mundo en una conferencia de prensa, retarlo. Que el Gobernador quiera decir que es un asunto político… que lo diga. Nada de lo que el gobernador diga o haga, visto su interés en recaudar money para la NRA, podrá devolverle la vida, la tranquilidad y la felicidad a la familia de los 21 asesinados en el tiroteo en la escuela de Texas.

¿Dónde estaba el Gobernador de Texas «custodiado» por el que a veces, cuando llegan las elecciones dice es «cubano», Ted «Cancún» Cruz, horas después del tiroteo? Aquí está la respuesta: contando dólares.

Eso dice Beto O´Rourke.

Señala el gobernador de Texas, Greg Abbott, que buscar leyes de armas más estrictas no es la «solución real» al problema de la violencia armada. ¿Falso, cierto? Lo que SÍ no es la solución, es pasarse los años, sin encontrar una SOLUCIÓN al problema.

Sus palabras fueron fuertemente criticadas por el gobernador de Illinois, J.B. Pritzker, quien criticó los comentarios de Abbott, calificándolos de «narrativa falsa» y citando informes de que «la mayoría de las armas utilizadas en los tiroteos en Chicago provienen de estados con leyes de armas poco estrictas». Lo cierto es que esa comparativa es injusta, desproporcionada, no exitosa y mediocre. Los «problemas» en Chicago son unos, los de Texas, diferentes. Sin contar, claro, con el hecho de que «los datos utilizados» para su «exposición», ni siquiera eran de Chicago, sino de Ilinois.

El gobernador de Illinois, J.B. Pritzker, criticó duramente y con sobradas razones al gobernador de Texas, Greg Abbott, luego de que el gobernador, durante un discurso sobre el tiroteo masivo en una escuela primaria en Uvalde, Texas, expusiera como «ejemplo» la criminalidad en Chicago como un ejemplo de por qué leyes más estrictas sobre armas no evitarán la violencia. Alguien debió interrumpir a Abbot para explicarle el desastre de su argumento comparativo.

Luego le dio lo que parece ser «un consejo final»:

«Haga algo mejor. Tiene 19 niños y dos profesores que merecen que hagamos lo mejor», dijo Pritzker en relación a los 21 asesinados.

Uvalde vs Parkland

Puede parecer que Parkland encendió «la chispa», pero este nuevo tiroteo ocurrido en una escuela parece será el que de algún modo disparará la famosa Ley de Control de Armas. Tal parece que Joe Biden y Kamala Harris están decididos, como nunca lo estuvieron un presidente y un vicepresidente en la historia de los EE.UU. en lograrlo. Se dice que incluso en el Senado y el Congreso de los EE.UU. esta vez Sí se espera que «algo» ocurra aunque…

Titular de CNN: El sospechoso del tiroteo en la escuela Uvalde era un solitario que compró dos rifles de asalto para su cumpleaños número 18.

La idea tras el titular de llamar al asesino «un solitario» en el caso del tiroteo en Texas es desacertada y es un ejemplo de como los medios de comunicación intentar hacer el llamado Brain Wash, o lavado de cerebro. Concentrar la idea en «otra» dirección. En la dirección incorrecta. No era un solitario. Es uno de los tantos que ha ejecutado este tipo de acciones y uno de los tantos que -lamentablemente – lo hará en un futuro.

Otro detalle: el distrito donde ocurrió el incidente tiene en total apenas 200 policías, pero al parecer algunos tienen problemas con «los pantalones». Según una nota de AP, la policía llegó «segundos» después de que Salvador Ramos entrara a la escuela armado. Ramos fue visto entrar a la escuela por varios vecinos con un rifle en la mano. Cuando la policía llegó, los vecinos le gritaron a la policía: «Entren, entren», les dijeron de los tiros – primeros – escuchados.

La policía no entró de inmediato. Demoró en hacerlo. Eso, argumentan los vecinos.

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