El pasado jueves se vivió una jornada de terror en el campus de la Universidad Estatal de Florida (FSU), en Tallahassee, que dejó un saldo de dos personas fallecidas y seis heridas, según informó el sheriff del condado de Leon, Walt McNeil.
Este trágico evento ha reavivado el debate sobre la violencia armada en Estados Unidos y la necesidad de implementar medidas más estrictas para prevenir futuros incidentes. La comunidad de FSU se une en el duelo y en la búsqueda de respuestas que permitan sanar y evitar que tragedias como esta se repitan.
Varias imágenes en redes sociales han dejado ver el pánico que se vivió en ese momento, donde un grupo significativo de personas empezó a correr fuera de las localidades del centro.
El tiroteo tuvo lugar en dos ubicaciones distintas: una bolera y al menos un restaurante y bar local. Las autoridades aún están tratando de esclarecer los hechos y están en la búsqueda activa de una "persona de interés" relacionada con los tiroteos.
El tiroteo se produjo como resultado de una altercación entre dos grupos poco antes de las 7 p.m. en el Broadwalk de Hollywood, entre Johnson Street y Garfield Street. Nueve personas resultaron heridas, incluyendo a cuatro menores de entre 1 y 17 años.
Un joven de 19 años llamado Cameron Everest Brand ha sido acusado de homicidio y agresión con agravantes en relación con el incidente, dijo el Departamento de Policía de Bay St. Louis, donde ocurrieron los hechos.
Las autoridades investigan un caso de robo y violencia en bicicleta en Miami Beach que llevó al arresto de un adolescente, mientras que en el noroeste de Miami-Dade, la policía busca al responsable de un tiroteo que dejó a un joven de 15 años muerto.
Señala el gobernador de Texas, Greg Abbott, que buscar leyes de armas más estrictas no es la "solución real" al problema de la violencia armada. ¿Falso, cierto? Lo que SÍ no es la solución, es pasarse los años, sin encontrar una SOLUCIÓN al problema.