El dilema de jubilarse en Cuba

Havana
algo de nubes
29.2 ° C
29.2 °
29.2 °
48 %
3.6kmh
20 %
Mar
29 °
Mié
30 °
Jue
29 °
Vie
31 °
Sáb
31 °

Entre los dos primeros meses del año en curso, unas 10 mil 700 personas han presentado sus trámites de jubilación en el sector estatal cubano, una cifra que prácticamente duplica a la consignada en igual período de 2021, según datos aportados a la prensa oficial por Virginia Marlén García Reyes, directora general del Instituto Nacional de Seguridad Social (INASS).

Una mujer en edad de jubilarse presentó sus papeles ante el organismo, quince días después de cumplir sus 60 años. Lo pudo hacer, cuenta, “gracias a las amistades que tengo en esa oficina, quienes desde hacía meses me sacaron las cuentas pertinentes y pactaron mi turno para esa fecha, previendo las acumulaciones de personas que ahora se ven todos los días”.

Situación parecida presenta un señor que este febrero arriba a sus 65 años y lleva la cuenta de los días que restan para finalmente poder jubilarse del sector cultural al que pertenece, en la capital.

“Yo no he podido sacar ningún turno, he escuchado y visto por la televisión que los trámites están muy demorados, pero ya lo hable con mi jefa de personal y en cuanto presente mi jubilación dejaré de trabajar. Ya estoy contando los días”, aseguró.

Sucede que en 2022 será el primer año en que se tome en cuenta el aumento salarial resultante del llamado ordenamiento económico y muchos trabajadores se prestan a esclarecer sus condiciones para el seguro social ofrecido por el estado cubano a quienes concluyen su etapa laboral y deciden jubilarse.

“El que se jubile a partir de 2022 va a recibir el beneficio de que se le va a tomar, para el cálculo de la pensión, solamente lo devengado durante 2021, y así sucesivamente, hasta que lleguemos a 2025. Este es un proceso que se va a aplicar en los cinco años siguientes a la reforma de salario”, precisó al diario Granma la funcionaria del INASS.

No obstante, más allá de las aparentes bondades que ofrece la seguridad social cubana, toca cuestionarse la situación de un país en el que los jóvenes tienen en su mayoría la aspiración de emigrar, mientras que los adultos en edad para jubilarse se aprestan a saldar cuanto antes su responsabilidad laboral con el estado.

Demográficamente hablando, ya se sabe que Cuba es un país profundamente envejecido, donde a pesar de los esfuerzos, la natalidad no ofrece muestras de incrementarse y donde el éxodo masivo está marcando no solo a las familias implicadas, sino también a la capacidad productiva del país en todos sus ámbitos.

Siendo claros, y aunque los datos estadísticos aún no lo confirmen públicamente, Cuba va camino a convertirse en un país para personas mayores, muchos de los cuales arriban a las edades de jubilación en plenas capacidades para continuar ejerciendo sus trabajos, u otros de menores responsabilidades.

Sin embargo, eligen casi siempre deslindarse de cualquier relación laboral con el estado cubano y en algunos casos se disponen a probar suerte en pequeños negocios, ya sea al margen o dentro de la ley.

Luego de las reformas salariales el monto mínimo por una jubilación es de unos mil 528 pesos, una cantidad de dinero cinco veces superior a las tarifas mantenidas con anterioridad y aún resulta insuficiente.

Si se analiza con papel y lápiz no le alcanza a ninguna familia promedio para comer ni siquiera en una semana. Mucho más si se toma en cuenta la cotización de la moneda libremente convertible que ya asciende a los 100 pesos cubanos y las únicas tiendas del país que se mantienen surtidas de productos son las que ofertan en esa moneda virtual.

En la nota publicada por el diario Granma sobre las demoras y trámites relacionados con la jubilación, un usuario identificado con el nombre de Andino comentó que “no es justo que un trabajador cubano con 30 años de trabajo se jubile con el 60 por ciento del salario en las actuales circunstancias de los precios, sería condenar a personas de la tercera edad a limitaciones en la compra de alimentos y bienes y servicios, que afectarían su calidad de vida”.

Según lo establecido por la ley vigente, la jubilación puede presentarse una vez cumplidos los 60 años en el caso de las mujeres y en el caso de los hombres cuando arriben a los 65. Para ambos sexos será imprescindible haber prestado como mínimo 30 años de servicio al estado.

Un buen número de quejas se han presentado también en las filiales provinciales de ese organismo debido a las demoras en los trámites, algo que los funcionarios justifican con la elevada cifra de solicitudes y advierten que todas las personas que lo deseen y cumplan con los años y requisitos para hacerlo, podrán presentar sus respectivas jubilaciones a lo largo de todo el año.

¿Quieres reportar algo?

Envía tu información a: [email protected]

Lo más leído

Quizás te interese

Envíos a CUBA desde → $1.89 x LBENVÍA AQUÍ
+