Una joven brasileña que estudia sobre la supuesta soberanía alimentaria en Cuba afirma que el hecho de «que las tierras aquí no estén en manos del latifundio ni del capital financiero internacional es una conquista difícil de repetir en otras partes de Latinoamérica» y es uno de los «logros de la Revolución Cubana»
Cuba, un país de contrastes y complejidades, ha sido recientemente objeto de análisis y opiniones divergentes por parte de dos extranjeras. Estas visiones contrapuestas reflejan las múltiples facetas de la isla, desde su supuesta «soberanía y logros revolucionarios» hasta sus desafíos económicos y sociales.
En un artículo titulado «Cuba es un atrevimiento de autonomía», publicado por el diario oficialista Granma el 20 de mayo de 2024, la brasileña Beatriz Gomes Cornachin, una doctoranda en soberanía alimentaria, ofrece al periodista José Llamos Cameja una visión positiva y esperanzadora de la realidad cubana. Obvio: con otra visión jamás le hubiesen publicado sus impresiones
Durante su pasantía en la Universidad de Guantánamo, Gomes destaca la capacidad de Cuba para mantener su soberanía a pesar de la hostilidad externa, especialmente la de Estados Unidos. Para esta brasileña, la reforma agraria cubana y la prioridad que el país otorga a la producción de alimentos son logros notables en un contexto internacional dominado por intereses foráneos y capital financiero.
Del texto publicado en el Granma extraigo fragmentos e ideas:
- La joven estudia sobre la soberanía alimentaria en Cuba. El título ya lo dice todo, pero ella amplía en su explicación:
- «Vine a Cuba con la idea de estudiar la soberanía alimentaria en esta nación, que hizo una reforma agraria exitosa; además, es de economía planificada, vive un contexto revolucionario y enfrenta la hostilidad de EE. UU.»
- El estudio es para comparar con la cuestión agraria en otros países:
- «La cuestión agraria interesa en Latinoamérica; en los campos de la región existen conflictos; somos grandes productores agrícolas, pero con grandes escenarios de desnutrición y, a diferencia de Cuba, gran parte de las tierras están en poder del latifundio y del capital extranjero.» La diferencia en realidad en que en Cuba están a manos del latifundista ESTADO que no las pone a producir. De las tierras que dio y quitó, y aquellas que se robó podemos elaborar una tesis.
- Impacto de los intereses foráneos en la producción de alimentos:
- «En interés del capital financiero internacional se están disminuyendo plantíos de cultivos tradicionales. Para producir más soya se siembra menos arroz, por ejemplo; lo que, unido a las sequías y los excesos de lluvias, tiende a reducir la producción de alimentos.» En Cuba, ¿qué se siembra?
- Necesidad de otras soberanías para alcanzar la alimentaria:
- «A un país subordinado a intereses foráneos y a escenarios económicos exteriores le cuesta mucho llegar a una soberanía alimentaria total, que garantice el derecho humano a la alimentación de sus habitantes.»
- Impacto del bloqueo y la agresividad imperialista:
- «Por eso maximiza el bloqueo, para generar carencias, retrocesos y malestares en Cuba, lo que justifica con argucias ideológicas y económicas.» La joven no aborda el bloqueo interno y la corrupción interna. Tampoco ahonda en la supeditación ideológica de todas las tareas, así sea la de sembrar en el campo.
- Logros de la Revolución Cubana en la tenencia de tierras:
- «Que las tierras aquí no estén en manos del latifundio ni del capital financiero internacional es una conquista difícil de repetir en otras partes de Latinoamérica.» (SIN PALABRAS)
- Desafíos en la producción alimentaria en Cuba:
- «Hay escasez de herramientas de trabajo, de tecnología, y hasta contradicciones que hacen parte de toda esa realidad.» También hay escasez de materia gris entre los dirigentes cubanos, pero ella no ahonda en ese aspecto.
- Contrastes con la situación en Brasil y Latinoamérica:
- «Como brasileña, siempre que converso con las personas aquí, hablo de los contrastes, de lo que nos falta en Latinoamérica y especialmente en Brasil, donde viven tantos sin tierras, y la inestabilidad política ha sido frecuente.» Bueno, podemos mandarlos para Cuba si desean, y mandamos unos cubanos para Brasil, a ver quién le va mejor.
- Impacto de las políticas públicas en su educación:
- «En mi familia soy la primera, y hasta ahora la única en acceder a estudios de doctorado; eso fue posible gracias a oportunidades abiertas por el actual Gobierno.» Son millones los brasileños que han accedido a estudios universitarios independientemente del gobierno de turno.
- Elogio a líderes revolucionarios cubanos:
- «De Fidel Castro y del Che Guevara hablo con frecuencia; su ejemplaridad me cautiva. Fidel hizo y guio una revolución victoriosa muy cerca de su principal enemigo, que es el más poderoso.» (SIN PALABRAS)
Beatriz Gomes resalta que, a diferencia de otros países de Latinoamérica, Cuba ha logrado mantener sus tierras fuera del control de los latifundios y del capital extranjero. «Aquí, producir alimentos es una prioridad y función esencial de sus suelos agrícolas», afirma Gomes. Aunque reconoce las dificultades que enfrenta el país, como la escasez de herramientas y tecnología agrícola, así como el impacto del bloqueo estadounidense, valora el esfuerzo del gobierno cubano por asegurar la soberanía alimentaria y el bienestar de su población.
Lo que vio una mexicana en Cuba
En contraste, un artículo publicado por Cibercuba Noticias el 21 de mayo de 2024 nos presenta una visión mucho más crítica y real de la realidad cubana, a través de la experiencia de la turista mexicana Irina Segura.
Tras recorrer varios lugares de la isla, incluyendo La Habana y Varadero, Segura describe a Cuba como un país «destrozado y sumido en una profunda crisis económica». En su video compartido en TikTok, Segura detalla los problemas que encontró, tales como apagones frecuentes, escasez de productos básicos y el deterioro de las edificaciones.
@jonixdose Estos son los CONTRASTES de La Habana Cuba 🇨🇺 Cómo se VIVE EN CUBA? #cuba #cubanos #parati #viral #fyp #cubanosporelmundo ♬ sonido original – jonixdose
Segura señala que, aunque Cuba es un país hermoso, los problemas económicos y la miseria son evidentes, especialmente fuera de las zonas turísticas. Relata cómo en los restaurantes a menudo le informaban sobre la falta de ciertos productos y cómo una mesera le pidió artículos personales debido a la escasez. También denuncia la corrupción en la empresa de telecomunicaciones ETECSA, donde tuvo que comprar un chip telefónico en el mercado negro por un precio exorbitante.
Estas dos perspectivas ponen de manifiesto la dualidad de la experiencia cubana.
Mientras Beatriz Gomes valora los supuestos logros revolucionarios y la «resiliencia» – no sobrevivencia – del pueblo cubano, Irina Segura se centra en las dificultades y carencias que afectan a la vida diaria en la isla.
Ambas visiones, aunque opuestas, aportan una comprensión más completa de las realidades y desafíos que enfrenta Cuba en la actualidad. Esta diversidad de opiniones refleja la complejidad de un país que sigue siendo objeto de debates y análisis tanto dentro como fuera de sus fronteras.
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