La policía detuvo a tres cubanos que asesinaban perros para venderlos como carne de puerco o carnero en San José de las lajas, provincia Mayabeque, lo que ha provocado que varios niños hayan caído enfermos.
La noticia la confirmó en su perfil de Facebook la activista por los derechos de los animales, Yenney Caballero. “Es criminal lo que hicieron estos elementos sin escrúpulos, mataron a la gran mayoría de los perritos comunitarios de San José de las lajas provincia Mayabeque, también a muchos animales que tenían familia, que hasta hoy no sabían del paradero de su mascota”, dijo.
“Hay tres en la policía son esos que ven en la foto, para allá van caminando familias que compraron la carne pensando que era de carnero o de puerco, hay niños enfermos por este tema”, añadió la activista.
Caballero apuntó que “el movimiento Animalista de Cuba exige justicia, que caiga todo el peso de la ley sobre estos delincuentes que no merecen ni el aire que respiran. Estos elementos deben estar fuera de la calle, me fui de la policía porque le metí con el puño a uno, les dije todo lo que sentía, faltan tres por coger dos mujeres y un hombre”.
Durante los últimos meses los cubanos han mostrado preocupación por la presunta venta de carne de gato o de perro en distintas provincias de la isla sin que exista una confirmación oficial que desmienta o confirme la veracidad de estos hechos.
El gobierno o cubano aprobó en 2021 El Decreto-Ley 31 con “disposiciones normativas que garanticen el bienestar animal y que, a la vez, contribuyan a concientizar a nuestra población en el cuidado y respeto a los mismos”.
El documento plantea que las personas que maltraten a los animales o pongan en peligros sus vidas deberán pagar multas de 1 500 CUP, 1 000 CUP y 500 pesos cubanos para las personas naturales; y de 4 000 CUP, 3 000 CUP y 2 000 pesos cubanos para las jurídicas, en dependencia de la infracción cometida.
Los activistas han considerado que esas medidas no se corresponden con la magnitud de esos delitos y han exigido que se apliquen otras penas más fuertes a los que abusen o hagan daño a los animales.