Finaliza el mes de octubre – hoy es 31 – y la Guardia Costera de Estados Unidos anuncia que interceptó este mes a más de 1100 balseros cubanos. A este ritmo, con la baja tasa de natalidad, Cuba se queda vacía.
Y si no se queda vacía, al menos habrá dificultad para encontrar «al último», ese que dicen apagará el Morro.
La Guardia Costera de Estados Unidos reporta que fueron, en total, mil 132 balseros cubanos que fueron interceptados por sus buques y tripulaciones en medio del Estrecho de la Florida. Una buena parte de ellos más que interceptados fueron «rescatados», pues hubo al menos un naufragio – con la pérdida de decenas de vidas – y otros dos «a punto» de ocurrir, si bien la inmensa mayoría de las embarcaciones empleadas por los nativo de Cuba en su desespero por salir de la isla, son presa fácil de las olas.
Este domingo, las autoridades estadounidenses devolvieron a Cuba a un grupo de 106 balseros cubanos, «capturados» en varias interdicciones en su camino hacia la Florida. Fue la tripulación del guardacostas Richard Eteheridge la encargada de llevar a cabo esta operación de repatriación de balseros cubanos hacia Cuba.
Mientras, por tierra, también llegan cubanos y en grandes números.
El pasado miércoles, agentes de la Patrulla Fronteriza en Arizona detuvo a un grupo de 61 migrantes, intentando entrar a territorio de los EE.UU. La mayoría de los migrantes eran ciudadanos de Cuba.
El hecho fue reportado hace unas horas por el agente Jefe de la Patrulla Fronteriza del Sector Tucson, John R. Modlin. Según la información compartida por este, los migrantes fueron interceptados cerca de Lukeville. En el grupo se encontraban una decena de niños con edades comprendidas entre los dos y 11 años.
“Cerca de Lukeville, Arizona, los agentes de la Estación Ajo se encontraron con 61 migrantes, en su mayoría ciudadanos cubanos, el miércoles por la noche. Diez eran niños de 2 a 11 años de edad”, especificó Modlin en un reporte emitido a través de la red social Twitter.
Más cercano en el tiempo, tuvo lugar la captura de 58 migrantes procedentes de Cuba, por autoridades de México. Los antillanos fueron atrapados junto a ciudadanos de otras nacionalidades, como venezolanos, colombianos y dominicanos.
El hecho tuvo lugar el domingo, y el comunicado emitido por el Instituto Nacional de Migración (INM) indicó que, los extranjeros fueron identificados el sábado, como parte de un operativo de verificación de personas. Los migrantes viajaban en diversos vehículos en el municipio Piedras Negras.
“El Instituto Nacional de Migración (INM) de la Secretaría de Gobernación identificó ayer a 72 personas migrantes de cuatro países que se encontraban a bordo de 11 camionetas en el municipio de Piedras Negras, Coahuila”, expresa el comunicado el comunicado.
“De las 72 personas migrantes, 58 son originarias de Cuba; 10 de Colombia; dos de Venezuela y dos más de República Dominicana. Se identificaron 20 adultos y menores de edad que conformaban siete núcleos familiares, quienes quedaron bajo la tutela de representantes del Sistema para el Desarrollo Integran de la Familia (DIF) en la entidad”, indica además la publicación.
También fueron capturados y quedaron a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR), las 13 personas que conducían los 11 vehículos involucrados en el hecho.
Hace cuestión de unas horas se conoció de la llegada a los EE.UU. de una de las mayores promesas del béisbol de Cuba: el pelotero cubano Luis Dariel Serrano. Serrano se marchó de Cuba en el 2018.
Así lo informó el periodista cubano Francys Romero, todo un especialista en éxodo de peloteros cubanos.
Romero informó además, en otra publicación, de la salida de Cuba de un joven prospecto del béisbol: el prospecto cubano Alejandro Prieto, de apenas 15 años de edad.
Según Romero, Prieto se encuentra ya en República Dominicana.
A este ritmo Cuba no solo parece que se quedará sin peloteros, sino también sin gente. Incluso, para que uno de ellos pueda apagar el Morro.
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