Una madre cubana regresó a la isla después de pasar un año y nueve meses en Estados Unidos, pero el menor de sus hijos no la reconoció.
Así lo contó a través de TikTok la propia Yurislaidis Abreu, que viajó a Cuba para reencontrarse con sus hijos después de recibir la residencia permanente en Estados Unidos.
Según mostró Abreu, que fue al círculo infantil al que asiste su hijo menor acompañada por su hija mayor, de unos diez años, y a quien ya había recogido también en la escuela, el pequeño no reaccionó al verla porque no la reconoció.
No obstante, la cubana cogió al niño en brazos antes de abrazarlo fuerte y besarlo porque sabe que el hecho de que él no supiera quién es ella “pronto cambiará”.
@yurislaidisabreu #cubanosporelmundo #inmigranteslatinos ♬ SPARTA – Yenty & TONYS BOY
Tras compartir el conmovedor reencuentro, Abreu respondió además a quienes criticaron su decisión de emigrar dejando en Cuba a sus dos hijos.
“Las personas hablan porque tuvieron la oportunidad de traer a sus hijos consigo, pero desgraciadamente yo no pude”, dijo ya de vuelta en Estados Unidos.
Asimismo, recalcó que “solo” salió de Cuba por el futuro de sus hijos y que tiene fe en que “pronto estarán conmigo aquí en este país”.
Si bien está consciente de que “no se recuperará el tiempo”, resaltó que “estarán en un país de libertad”. “Peor es estar en Cuba, pasando necesidades. Aquí les puedo dar lo que necesiten”, acotó.
“No hay nada mejor que esto, mis amores. Mamá cada día se esfuerza por que no les falte nada y estén bien”, expresó Abreu en otro video en el que recoge emotivos instantes de su viaje a Cuba.
@yurislaidisabreu ♬ sonido original – Diego Yactayo
“Nos vamos buscando que no les falte nada y al final les faltamos nosotros, pero tranquila, todo es por un futuro mejor. Ya crecerá y entenderá”, comentó otra internauta al resumir el drama que viven muchas madres cubanas.
Por un lado, hay madres con tres niñas que, aunque tuvieron “varias oportunidades” de irse solas, sostienen que “veníamos las cuatro juntas o las cuatro seguíamos en Cuba” porque, pese a que “es una decisión de cada quién”, creen que los hijos deben estar con mamá siempre “en buenas y malas”.
Por otra parte, están las que muestran respeto y admiración por quienes tienen el “valor” de emigrar sin sus hijos porque “son unas campeonas”; o quienes no se arrepienten de haberlo hecho cuando ven cómo sus hijos viven ahora, “felices con de todo lo necesario”.
“Ay, Dios, qué dolor sentimos todas las madres que tuvimos que dejar a nuestros hijos para poder darle un futuro mejor. Así me pasará a mí” o “Soy una de esas guerreras. Me tocó dejar atrás a mis tres niños. Solo Dios sabe cómo se sufre”, opinaron otras sobre la misma cuerda.
