En la Base de la Fuerza Aérea MacDill, ubicada en Tampa, Florida, el personal militar se encontró con una sorpresa poco común el pasado martes por la mañana: un caimán de casi tres metros de largo merodeaba por las instalaciones. El reptil fue avistado cerca de las 8:00 AM en una zona frecuentada por el personal de la base para realizar actividades recreativas.
El Departamento de Control de Fauna Silvestre de Florida fue alertado de inmediato y envió un equipo especializado para capturar al caimán. «Hemos visto caimanes en la base antes, pero este es uno de los más grandes que hemos encontrado», declaró el sargento John Mitchell, portavoz de la base. «Afortunadamente, no hubo ningún herido y la captura se realizó de manera segura».
La operación de captura, que duró aproximadamente una hora, fue llevada a cabo por tres expertos en fauna silvestre, quienes utilizaron métodos estándar para asegurar al caimán sin causarle daño. «Utilizamos un lazo y una cinta adhesiva para inmovilizar sus mandíbulas, lo que nos permitió transportarlo de manera segura», explicó Karen Adams, una de las especialistas en fauna que participó en la captura.
El caimán fue posteriormente trasladado a un hábitat adecuado en una reserva natural local. «Es importante recordar que los caimanes forman parte del ecosistema de Florida y nuestro objetivo es siempre reubicarlos en lugares donde puedan vivir sin representar un peligro para los humanos», añadió Adams.
Este tipo de incidentes no es raro en Florida, especialmente durante la primavera y el verano, cuando los caimanes se vuelven más activos debido al aumento de las temperaturas. «En esta época del año, es común que los caimanes se desplacen en busca de nuevos territorios o parejas», explicó Frank Mazzotti, profesor de ecología de vida silvestre en la Universidad de Florida .
El avistamiento y captura del caimán en la Base de la Fuerza Aérea MacDill ha generado una mayor conciencia sobre la convivencia con la fauna local.
«Vivimos en un estado donde la vida silvestre es abundante, y es fundamental que la gente sepa cómo actuar si se encuentra con un caimán», comentó Mitchell. «El primer paso es siempre mantener la calma y notificar a las autoridades competentes», agregó.
El incidente ha llevado a la base a reforzar las medidas de seguridad y educación sobre la vida silvestre entre su personal. Se están planificando talleres informativos para enseñar a los residentes y trabajadores de la base cómo reaccionar ante encuentros con caimanes y otros animales salvajes.
Por otra parte, la publicación en las redes sociales y en los medios, debido a la foto tomada, ha reavivado la pregunta de siempre: ¿es este el caimán más grande jamás visto?
Bueno, pues no. La foto engaña a la vista. Hay un truco en la imagen, pues el caimán está sobre una acera y detrás hay un desnivel en el terreno, que hace que el ojo humano se engañe con el tamaño del reptil.
El caimán capturado en la Base de la Fuerza Aérea MacDill no llegaba a los diez pies. Es, si se pudiera decir, un «bebé recién nacido», al lado de otros vistos – capturados o no – en la Florida, que superan facilmente ese tamaño.
Los monstruosos caimanes, para ser considerados como auténticos concursantes del título del caimán más grande, deben al menos superar los 12 pies. Los hay que han superado los 13. Incluso los 14. De hecho, se habla de que uno, una vez, llegó a 15.
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