Dos noticias relacionadas con acciones ejecutadas por buenos samaritanos son noticia en la Florida en las últimas horas.
Una de ellas tiene que ver con el rescate de un anciano de 89 años. La otra, con la reunificación de un padre con su hijo con la persona que los rescató de un accidente.
Y aunque el huracán Ian ya es historia, otras «historias» relacionadas con su desastroso paso por la Florida continúan saliendo a la luz. Una de ellas está relacionada con el rescata de un anciano, que se encontraba cubierto por una pila de escombros.
Sucedió en Ft. Myers, ciudad que fue arrasada por los vientos y las marejadas provocadas por Ian.
Según cuenta 7News, buenos samaritanos corrieron al rescate después de que un anciano fuera descubierto debajo de una pila de escombros en Fort Myers Beach.
Según se puede ver en el video, un grupo de hombres ayudó a sacar a Jim Gresh, de 89 años, de los escombros en Fort Myers Beach.
“Por lo que escuché, estuvo en esa casa durante el huracán, así que sí, bastante aterrador”, dijo James Cox, uno de los rescatistas.
Cox se encontraba caminando por la playa con un amigo el día después del paso del huracán, para ver los destrozos provocados por el fenómeno, cuando dijo que de pronto escuchó una voz.
La caminata se convirtió en una misión de rescate, y tanto Cox como su amigo emergieron como dos buenos samaritanos.
Cox y su amigo, tras conversar brevemente con el hombre para saber cómo se encontradba, fueron rápidamente a buscar ayuda. Junto a otras tres personas lograron sacar al anciano de las ruinas y hasta usaron palos y tablas para usarlos como una camilla.
Finalmente pudieron llevar al anciano hasta donde se encontraban los rescatistas oficiales y estos trasladaron al anciano en un helicóptero hasta un hospital cercano.
La otra historia tiene que ver con el reencuentro de un hijo, y su padre, con el hombre que los rescató de un accidente. Ambos reconocen que están vivos gracias a la acción de este hombre, quien finalmente pudo reencontrarse con ellos.
El auto en el que viajaban Eddie Rivera y su hijo, Leo, se volcó en un accidente de tránsito, pero quiso Dios que cerca estuviese el hombre que los salvó.
El accidente ocurrió el pasado 4 de julio y fue tan grave que solo ahora fue que se pudieron reencontrar con Wisguere Dormevil, el hombre que les salvó la vida. Este dice que iba conduciendo hacia la playa cuando vio el accidente delante de sus ojos.
“Dios me puso en el lugar correcto y en el momento correcto”, dijo Dormevil,el buen samaritano que fue la primera persona que acudió al lugar del accidente y que eventualmente salvó la vida de Eddie y de su hijo Leo.
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