Un masajista de origen cubano que trabaja en Miami Beach ha sido arrestado y enfrenta serias acusaciones tras ser reportado por agresión sexual a una de sus clientas durante una sesión que supuestamente debía ser de drenaje linfático.
Erick Carmona Barrios, un cubano de 51 años, masajista, ha sido señalado por las autoridades como el responsable del incidente que tuvo lugar el pasado viernes en el establecimiento Sun Curves Miami, situado en 1000 West Ave., South Beach.
Según el informe policial, la víctima, quien había recibido tratamientos anteriores sin incidentes por parte del cubano, relató que hacia el final de la sesión de dos horas, aproximadamente a las 7:45 p.m., el masajista procedió a bajarle la ropa interior y a masajear su área pélvica, acercándose gradualmente de manera inapropiada hacia sus genitales de una forma que describió como «más sensual».
La mujer, superada por el miedo al verse en una posición vulnerable ante alguien físicamente más grande y fuerte, le pidió al masajista cubano que se detuviera cuando comenzó a tocar sus genitales. A pesar de esto, Barrios no solo continuó sino que también empezó a tocar sus senos. La situación escaló a un punto en que Barrios la penetró con sus dedos, y solo se detuvo cuando ella pronunció un firme «¡no!».
Aprovechando un momento en que se volvió a girar sobre la mesa de masajes, la víctima vio una oportunidad para escapar bajo el pretexto de necesitar usar el baño. Se vistió rápidamente y se dirigió a la recepción para informar lo ocurrido. La afectada salió de la sala visiblemente angustiada y llorando, siendo su estado de severa angustia confirmado por grabaciones de video de vigilancia, donde se la ve señalando su área genital mientras describía el asalto.
Las autoridades fueron alertadas del incidente alrededor de las 8:30 p.m. y respondieron al lugar. La dueña del spa, sorprendida por los eventos, aseguró a la policía que durante una sesión de drenaje linfático «bajo ninguna circunstancia se toca el área vulvar/vaginal», y que en sus propias sesiones con Barrios, nunca se le retiró la ropa interior.
Durante una entrevista con la policía, el masajista cubano admitió que podría haber tocado accidentalmente la zona íntima de la mujer, pero negó cualquier intención indebida, así como cualquier acto de penetración o tocamiento de los senos de la víctima.
Sin embargo, a pesar de sus palabras y negación de los hechos, el masajista cubano fue arrestado y enfrenta cargos por agresión sexual a una víctima físicamente indefensa. Un juez le impuso una fianza de $10,000, pero Barrios permanece detenido debido a un asunto migratorio.
El abogado de Barrios ha declarado que su cliente es un masajista cubano registrado y que además es ciego, circunstancia que complica aún más el perfil del caso. La dueña del spa ha despedido a Barrios y ha expresado su cooperación total con las investigaciones policiales, subrayando que los hechos alegados no concuerdan con el hombre que ella conocía.
