La cantante cubanoamericana Gloria Estefan ha dado su respaldo a un plan de ayuda que busca frenar el crecimiento de las personas sin hogar en Estados Unidos.
Al intervenir en la conferencia anual de la Red Nacional de Refugios para Mujeres (NWSN, por sus siglas en inglés), que tiene lugar hasta este viernes en Miami, considerada entre las tres ciudades menos asequibles del país, Estefan dejó claro que “toda ayuda suma”.
“Nuestro gobierno tiene que ayudar, cada uno puede ayudar de voluntario o con donaciones por pequeñas que sean”, subrayó la también compositora, actriz y empresaria sin olvidar que un 80% de las mujeres que se encuentran en albergues son víctimas de violencia de género.
Según reportó Telemundo, la destacada artista se unió al urgente reclamo de las líderes de casi 200 albergues para mujeres que piden atacar la “crisis nacional de salud pública” que constituye la creciente población de las personas “sin techo” o “homeless”.
De acuerdo con cifras ofrecidas por NWSN, cada año en Estados Unidos 1,2 millones de mujeres y 2,5 millones de menores de edad “experimentan desamparo”, o lo que es lo mismo, se quedan sin hogar.
Al mismo tiempo, la presidenta de la citada red de refugios, Constance Collins, agregó que al menos 1 de cada 30 niños del país podrían quedar sin hogar, la mayoría de ellos menores de 10 años.
La también fundadora del albergue para mujeres Lotus House en Miami dijo que el problema de las personas sin hogar alcanza “proporciones épicas” porque afecta prácticamente a todas las comunidades del país.
Además, a Collins le parece “inconcebible” que “la falta de vivienda se ha vuelto una norma para los niños de nuestro país, que es la nación más rica y probablemente una de las más poderosas del mundo”.
Aunque la violencia de género es la causa principal por la que las mujeres se quedan “sin techo”, existen otros “factores contribuyentes”, como la escasez de vivienda asequible, que provoca una “demanda inasumible” para los albergues; el aumento del coste de vida; y las dificultades en la atención sanitaria, sobre todo cuando se trata de enfermedades mentales.
Para enfrentar este flagelo, Collins propuso incrementar los fondos, tanto públicos como privados, que existen en la actualidad; y contar con “un lote de viviendas permanentes, fácilmente disponibles, verdaderamente asequibles en todo nuestro país para personas de ingresos extremadamente bajos”.