Yotuel Romero y los trucos para estirar la comida en Cuba

A sus 44 años Yotuel Romero acumula vivencias y recuerdos que denotan la persona emprendedora y sacrificada que lo han convertido en lo que es hoy.

Yotuel Romero ha logrado convertirse en una estrella dentro del mundo de la música latina, pero fácil no ha sido el camino ni tampoco sus años en Cuba.

En una entrevista que recientemente ofreció a la revista española Semana, el ex integrante del grupo Orishas se refirió a la situación de la isla y en particular recordó la de malabares que tenían que hacer en su hogar para que la comida rindiese.

“Es muy difícil la vida allí. El cubano no puede ser rico en su país, no puede ser poderoso, porque el gobierno no lo permite. Allí los únicos ricos tienen que ser ellos y es algo que te limita mucho a la hora de conseguir materia prima, y la poca que puedas conseguir, la tienes que convertir de mil maneras”, expresó Romero.

“Recuerdo que solo teníamos un hueso de carne y lo aprovechábamos al máximo. Hervíamos la pata, de esa agua hacíamos sopa, la carne la picábamos, le echábamos tomate y hacíamos una ropa vieja y con el huevo hacíamos un arroz y lo utilizábamos para darle saborcito…”, continuó.

El cantante salió de Cuba a la edad de 20 años, y su primer destino fue Francia, lo cual le resultó el triple de difícil dada la barrera del idioma.

“Cuando salí de Cuba me fui a París sin nada, sin hablar francés, sin conocer mundo. Tenía 20 años cuando me marché y sabía que era un viaje sin regreso, que no vería a mi mamá por dos o tres años, que no tenía un padre que me pudiera mandar 20 dólares, en un país en el que no sabía qué me iba a encontrar”, contó.

Durante la entrevista el exitoso músico también se refirió a la ausencia de su progenitor, y como esa experiencia le ha valido para ser él un excelente padre.

“Yo no tuve padre. Él nos abandonó en los años 80, se fue a EEUU y mi madre tuvo que luchar para sacarnos adelante y que no nos faltara de nada. Entonces me prometí a mí mismo ser el padre que nunca tuve. Para mi hijo mayor yo soy como su hermano y para Didi, igual. Yo trato de intentar ser con ellos como me gustaría que mi padre hubiera sido conmigo”.

Yotuel acumula años de fama y logros, pero nada de ello ha caído del cielo. Con sus vivencias narradas a la revista Semana nuevamente demuestra la humildad y grandeza humana que le caracterizan, y también su gran poder de emprendimiento.

Olivia Pérez