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Los Medias Blancas de Chicago logran acuerdo con el lanzador cubano Norge Carlos Vera por 1.5 millones de dólares

Este fin de semana se conoció que los Medias Blancas de Chicago llegaron a un acuerdo con el lanzador cubano Norge Carlos Vera por un bono de 1.5 millones de dólares en espera de oficializar contrato, hasta que se abra el nuevo período de firma internacional a principios del venidero mes de julio.

El joven de 19 años con 6’2 de estatura y 185 libras de peso había impresionado a los cazatalentos en el Ramapo College en Mahwah, New Jersey, durante su primer showcase, donde había realizado una práctica con 12 bateadores y sostuvo la velocidad de su recta sobre las 90 millas por hora, llegando hasta los 94.

En esa oportunidad Norge Carlos Vera fue perfilado como un lanzador abridor por su habilidad para mezclar diferentes tipos de lanzamientos desde diferentes ángulos y cambiar la cadencia de sus envíos para romperles el ritmo a los bateadores.

Esta misma semana, había tenido la oportunidad de lucir sus dotes en una presentación en la República Dominicana ante diferentes directivos de más de 15 organizaciones de Grandes Ligas. Sobrepasó las 94 millas por hora en su recta y marcó silders de 81 y curvas hasta 74 mph.

Incluido en el famoso listado de 34 peloteros que la Federación Cubana de Béisbol le entregó a la Mayor League Baseball (MLB) antes de la ruptura del contrato por parte de la administración Trump, el natural de Santiago de Cuba había hecho su debut con la selección nacional contra los New Jersey Jackals de la Liga Independiente Can-Am y luego desertó antes de trasladarse a tierras estadounidenses para el tradicional tope anual con los universitarios de ese país.

Su padre, Norge Luis Vera, fue uno de los mejores lanzadores de la isla y conserva el récord de más juegos ganados en una temporada con 32, además de participar en tres olimpiadas y en el Clásico Mundial de Béisbol. Se le recuerda también como el lanzador que ganó el juego de exhibición contra los Orioles de Baltimore en el año 1999.

“Me gustaría que Norge Carlos creciera como hombre y como atleta en la misma posición que me tocó desempeñarme a mí. Tiene aptitudes importantes para ser lanzador, la recta le camina bien y es capaz de lanzar por varios ángulos”, declaró el padre hace unos años cuando su hijo era un total desconocido.

Norge Carlos Vera, representado ahora por Charisse Dash y Alex Cotto de The Movement Management Group, llamó la atención desde su primera salida en Series Nacionales cuando lanzó siete entradas inmaculadas ante los Alazanes de Granma, y dejó un balance de dos victorias y tres derrotas, un promedio de limpias de 3,79 y 37 ponches, en su única temporada en el béisbol cubano.

Con esta firma, el joven Vera se une a otros cubanos que ya forman parte de la franquicia como el antesalista Yoan Moncada, la primera base José Dariel Abreu, el receptor Yasmani Grandal y la sensación del momento Luis Robert Moirán, entre otros. El pasado año el prospecto que recibió el bono más alto en la clase de fichajes del equipo fue el torpedero cubano Yolbert Sánchez, con $2.5 millones.

En la historia, luminarias como el jardinero Minnie Miñoso, el campocorto Alexei Ramírez y los lanzadores José Ariel Contreras y Orlando “El Duke” Hernández, fueron también parte del club de los Medias Blancas.

Según se comenta en varios sitios beisboleros, la gerencia del equipo pudiera estar interesada también en la última de las estrellas cubanas que abandonó la isla: Oscar Luis Colás, quien es llamado el “Otani cubano” por su capacidad para batear y lanzar con efectividad y estaba contratado en la Liga profesional de Japón al momento de desertar.

El próximo mes de julio, otros cubanos estarán a la espera de un contrato en el mercado de firmas, entre ellos Pedro León, Dyan Yamel Jorge, Edgar Quero, y Yoelkis Céspedes.

Roque Díaz


 

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