México deporta a 66 ciudadanos cubanos

Este miércoles arribaron al Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, 66 ciudadanos cubanos deportados desde México. Los emigrantes habían salido legalmente del país, pero una vez en territorio azteca se convirtieron en migrantes irregulares. Al ser de “interés” por parte de la isla, estos fueron devueltos a La Habana siguiendo indicaciones establecidas dentro del llamado “Memorando de Entendimiento” firmado entre Cuba y México para regular – entre otros aspectos – la llamada política migratoria.

Los nombres de los migrantes no fueron dados a conocer por la prensa oficialista de la isla. Eso sí, se conoce que se trata de un grupo compuesto por 45 hombres, 20 mujeres y una menor de edad, que viajaron a bordo de una aeronave de la Policía Federal Mexicana.

66 #ciudadanos #cubanos deportados de #México, 45 hombres, 20 mujeres y un niño, llegó hoy a esta capital, luego de varios días entre sinsabores y peligros como parte de una migración irregularhttps://t.co/xKb0COUPMb pic.twitter.com/HqglebR2OR

— ACN DIGITAL (@ACN_Cuba) March 27, 2019

El diario Granma se limitó a decir que los 66, habían sufrido “las consecuencias derivadas de la migración ilegal, el tráfico ilícito de personas, la trata y otros males asociados a este fenómeno.”

“La devolución responde a un Memorando de Entendimiento en materia migratoria firmado entre Cuba y México el 6 de noviembre de 2015 – que actualiza uno anterior de 2008 – en el que se reitera el interés de los dos países por prevenir y combatir la migración ilegal, facilitar los flujos migratorios legales, así como establecer el intercambio de información y cooperación en la esfera migratoria,” expresa el diario oficialista, que no explica “cuál es el interés” de la isla, en cada caso específico sobre estos 66 deportados.

En la nota de Granma, se expresa además que estos serán llevados a sus respectivos hogares en las próximas horas, al tiempo que se recalca la voluntad del gobierno cubano “en seguir trabajando para garantizar el flujo creciente de viajeros de manera regular, ordenada y segura, sin restricciones”, lo cual dice le permitirá a todos “los ciudadanos de nuestro país viajar por el motivo que considere”, aunque la realidad es que el único motivo que los impulsa es ese: emigrar, al país que sea.

Este ha sido, durante varios años el método de escape a la crisis que se vive en la isla. Ya sea por barco o atravesando las selvas en el continente latinoamericano. O acogiéndose a una Ley de Nietos en España.