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Escándalo en Reino Unido: Asesino serial será vacunado contra la covid-19

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Un asesino serial va a ser vacunado pronto en Inglaterra contra el coronavirus y el hecho ha desatado un escándalo nacional. ¿Usted qué opina?

Poco menos que un escándalo hay ahora mismo en el Reino Unido: un asesino serial será vacunado contra la covid-19 “por encima” de miles de personas vulnerables, ancianos en su mayoría, ciudadanos que jamás han cometido un delito -o al menos no crímenes deleznables- y que se sienten con más derechos a recibir la vacuna que este asesino en serie.

¿Cómo un hombre que quitó tantas vidas, un femenicida en toda potencia, ha sido beneficiado con este “regalo”? Esa es la pregunta que muchos se hacen.

Bien, al parecer no será el único.

Levi Bellfield, de 52 años, y algunos otros reclusos de la prisión de máxima seguridad de Frankland, en el condado de Durham, podrían ser vacunados en las próximas semanas, según reveló en una exclusiva el diario The Sun.

Asesino en serie

Bellfield también mató a Marsha McDonnell, de 19 años, en 2003. Crédito: Archivo

Bellfield dijo en un mensaje a sus familiares que le habría llegado la notificación de que en las próximas tres o cuatro semanas sería vacunado.

La gente, indignada, protesta por el hecho. Entre los miles que esperan por la vacuna hay trabajadores de primera línea en hospitales, centros de salud y policías. También hay maestros que todavía esperan la vacuna que les salve la vida y ¿benefician a un asesino serial?

Un asesino en serie

El asesino mató a Amelie Delagrange, de 22 años, en 2004. Crédito: Archivo

Al respecto, el exsecretario del Interior David Blunkett manifestaba: “Es imposible creer que los presos, y mucho menos un asesino de niños, deberían tener la oportunidad de recibir una dosis de vacuna temprana.”

Luego fustigó al Secretario de Justicia.

“Espero intervenga de inmediato y descubra por qué se están aplicando escasas dosis de vacunas de esta manera, y de quién fue la idea”, señaló.

Bellfield, de 52 años, asesinó a Milly Dowler, de 13 años, así como a Marsha McDonnell, de 19 años, en 2003, y a Amelie Delagrange de 22 años en 2004.

Asesino serial

Bellfield asesinó a Milly Dowler, de 13 años, en Walton-on-Thames en 2003.Crédito: PA: Press Association

También estarían en “la lista” Ian Huntley; el asesino de Lee Rigby, Michael Adebolajo; y Sean Mercer, quien mató a tiros a Rhys Jones, de 11 años, en Croxteth, Liverpool, en 2007; además de Mark Dixie, quien asesinó a la modelo Sally Anne Bowman en Croydon, South London, en 2005.

La madre de esta última, dijo: “Es francamente repugnante que Bellfield y otras alimañas pudieran ser vacunados antes que algunos de los más vulnerables de nuestra sociedad”.

La mujer calificó el hecho de “insulto”.



Igual cree David Spencer, del Centro para la Prevención del Crimen.

“Es un escándalo nacional. La noción de que los delincuentes tienen prioridad sobre los ciudadanos respetuosos de la ley dice todo sobre la forma en que nuestro sistema de justicia penal se administra en este momento”, expresó.

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Cuando aún el gobierno inglés busca vacunar a sus cuatro grupos prioritarios principales, el escándalo con la presunta notificación a estos presos de que serían vacunados pronto, apenas comienza.

“Del otro lado de las rejas”, residentes de hogares de ancianos y sus cuidadores, mayores de 80 años y trabajadores de atención sanitaria y social de primera línea, mayores de 75 y mayores de 70, además de personas extremadamente vulnerables por su historial clínico, conforman ese primer grupo al que al parecer, le quieren meter delante a los presos de Farkland; por delante además del presunto segundo grupo, el de los mayores de 65 años y luego los de 16 a 64 años con problemas de salud subyacentes graves.

El cuarto grupo, el de los mayores de 55 años y el siguiente, el de las personas de 50 a 55, también serían puestos después que los presos de la prisión de máxima seguridad.

El ex detective Colin Sutton, el policía que atrapó a Bellfield, apuntaba:

“Es espantoso que él y otros prisioneros aparentemente deberían saltar la cola antes que la gente común y, especialmente, los trabajadores esenciales. Se debe dar prioridad al personal de la prisión, los oficiales de policía, los maestros, los trabajadores de tiendas y los conductores de reparto, las personas que mantienen en marcha al país”.

Y usted, lector, ¿qué opina al respecto?

Roberto A.

con información de The Sun.

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