Doctor José Rubiera, ingresado tras sufrir un infarto en Cuba

Los cubanos aseguran que el Doctor José Rubiera es una de las personas que más sabe de huracanes en el mundo, y lo veneran como un Santo Protector contra los huracanes en la isla.

El meteorólogo cubano José Rubiera se encuentra ingresado en la unidad de Terapia Intensiva del Instituto de Cardiología y Cirugía Cardiovascular de La Habana, según confirmaron a CiberCuba fuentes del hospital.

De acuerdo con una llamada telefónica efectuada al hospital por la periodista independiente Iliana Hernández, Rubiera habría sufrido un infarto. Aunque no se reveló la causa, se sabe que el queridísimo especialista en meteorología, una especie de Santo o Patrón contra los huracanes en Cuba, se encuentra estable, de momento, y no ha sufrido complicaciones.

Cibercuba logró conocer a través de fuentes que tiene dentro del Cardiovascular de La Habana, que el querido Rubiera, desde su ingreso, no ha presentado dolor precordial, nombre que se le da a la zona del pecho donde está el corazón.

Ni siquiera sus familiares han podido acceder a verle a la sala de Terapia Intensiva, confirmaron las fuentes a Cibercuba. Estos reciben sí, claro, los partes de la evolución del paciente, que está siendo atendido por el prestigioso doctor Juan José Quirós.

Es difícil explicar en pocas palabras qué significa para los cubanos la figura del Doctor José Rubiera.

Durante años al frente del Centro Nacional de Pronósticos del Instituto de Meteorología de Cuba, este investigador, científico, y doctor en Ciencias, nacido el 22 de enero de 1949 en San Antonio del Río Blanco, en Jaruco, provincia de Mayabeque, se ha convertido en la imagen de Cuba frente a las inclemencias del tiempo.

Es vicepresidente del Comité de Huracanes de la Asociación Regional IV América del Norte, América Central y el Caribe de la Organización Meteorológica Mundial, en representación de Cuba ante este comité, desde el año 1989, y todo un experto en huracanes.

Los cubanos aseguran que el Doctor José Rubiera es una de las personas que más sabe de huracanes en el mundo, y no por gusto ha ostentado los cargos a nivel internacional que tenido.

Pero, más que eso, su rostro afable y excelentes maneras de comunicación de frente a la cámara, lo convirtieron durante sus muchos años de comparecencia televisiva y poco sueño, cazando huracanes y ciclones de manera regular en la temporada ciclónica en una figura hogareña; una especie de totem familiar al cual acudir cada vez que se aproximaba un huracán a la isla.

Tanto así que los cubanos, creen que Rubiera tiene “poderes” para desviar huracanes. “Poderes” que nacen de su conocimiento, y del estudio; de valorar todas las posibles variables que inciden en la formación y debilitamiento de los eventos atmosféricos tales como ciclones y tormentas.

Anécdotas de la devoción con la que los cubanos veneran a Rubiera existen miles. Pocos cubanos son tan queridos y son capaces de generar sentimientos de simpatía y cariño entre los “bandos opuestos” de cubanos enfrentados por la política. Tanto los que viven dentro de Cuba, como los que viven en el exilio, respetan y admiran a Rubiera como un rara avis dentro del oficialismo cubano.

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Muestra de ello ocurrió cuando el huracán Irma. Rubiera se encontraba fuera de Cuba, y la información sobre el fenómeno comenzó a ser tan difusa y a provocar tanto ruido entre los cubanos, que se dice que Rubiera fue mandado a buscar. Tan solo su mera aparición en la televisión significó un alivio para los millones de cubanos y los periódicos digitales cubanos, que a duras penas lograban decenas de visitas con los partes que daban los demás especialistas; recibieron miles de visitas con la aparición de Rubiera en la televisión cubana.

Esperamos sinceramente que el Doctor se recupere, para que nos siga dando la información como solo él sabe hacerlo.

por Ariel P.