Cuba: Animalistas piden el fin de las peleas de gallos

¿Las peleas de gallos se regularán en el Decreto-ley sobre bienestar animal?

Mucho de oscuro parece haber detrás de la elaboración en Cuba del Decreto-ley sobre bienestar animal. Ahora ha trascendido que aunque se prohibirán las peleas de perros, no pasará lo mismo con las peleas de gallos. ¿Cuáles serían las razones?

Ya resulta muy controversial que para la redacción y discusión de este texto que debe regular la protección de especies de cualquier raza en la isla, hayan quedado fuera la mayoría de los animalistas más activos. Solo participa la estatal Asociación para la Protección de Animales y Plantas (ANIPLANT), adscrita al Ministerio cubano de la Agricultura.

Asimismo se sabe que aunque se habilitó un correo electrónico para que se enviaran criterios y comentarios acerca del Decreto-ley, pareciera tan solo una estrategia para que los cubanos crean que pueden ser parte del debate.

Hace pocas horas en el perfil de Facebook del grupo Cuba contra el Maltrato Animal se alertaba:

“Cubano, el Ministerio de la Agricultura anda buscando pretextos para justificar que las peleas de gallos legales de ALCONA permanezcan. Usan la excusa de que no hay masa crítica que se oponga a ellas. Demostremos que hay una masa de cubanos que pide que las peleas de gallo legales de Alcona terminen YA”.

Los animalistas piden además que se firme una petición que han creado y en la cual explican:

“Prohibidas al triunfo de la Revolución, las peleas de gallos fueron despenalizadas en 1980 cuando se estableció el primer criadero estatal de gallos de pelea manejado por Flora y Fauna, una entidad del Ministerio de la Agricultura. Hoy día ALCONA −la empresa comercializadora y exportadora de gallos de lidia– organiza y controla las peleas que se realizan en las vallas estatales existentes en todas las provincias del país. ALCONA le sirve además de sombrilla de protección a los galleros cubanos”.

En un artículo publicado en el portal Cubaencuentro en el año 2012, un asistente a una de esas peleas de gallos organizada en Alcona describía el ambiente:

Cuando empezó la función de las peleas, el comandante Guillermo García ocupó el lugar mejor situado en la primera fila, rodeado de otros jerarcas del Gobierno y de las Fuerzas Armadas (FAR), y de varios extranjeros, todos latinoamericanos, en su mayoría mexicanos, que se habían trasladado a Cuba con sus gallos a participar en este evento.

La fiesta se fue poniendo buena y al poco rato los participantes ya estaban apostando, agitando los dólares verdes del imperio con una mano y con la otra sosteniendo una cerveza, entre gritos y carcajadas, en medio de la orgía de sangre animal.

Andreu Romero

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