Christina Phillips: Dejó a su marido abusador y perdió 525 libras

Christina Phillips logró superar una infancia difícil, un marido abusivo y su dependencia a la comida. Perdió 525 libras y es otra mujer.

La historia de Christina Phillips, una mujer que pesaba 708 libras y que no había salido de su casa en dos años, puede servir de inspiración a muchas mujeres que luchan contra la obesidad.

Phillips dijo a la revista People que, después de dejar a su esposo abusivo, perdió 525 libras y pudo, al fin, recuperar su vida.

Ates de que decidiera recuperar el control de su vida, esta no era muy placentera que digamos.

“Antes no podía caminar dos metros y medio sin sentir que iba a morir,” contó Phillips a la revista.

Su historia de obesidad comenzó desde que era una niña. Tenía 12 años, y ya Christina pesaba 286 libras.

Dice que desde niña vio a sus padres discutir todo el tiempo y que esa ansiedad le hizo comer más y más para enfrentar su situación.

Siempre tuvo claro que quería algo mejor para su vida.

Para colmo de males, su obesidad la hizo dependiente de su esposo, para que este la ayudara a hacer lo básico dentro de la casa. Esta dependencia es a menudo imposible de romper para muchas mujeres.

Christina tenía 22 años cuando apareció por primera vez en My 600-Lb Life. Cuando se inscribió en el popular programa del canal TLC, Christina estaba postrada en cama y ni siquiera podía cuidarse a sí misma; se había vuelto completamente dependiente de su familia y su esposo Zach.

Así lo dijo en el programa, frente al Dr. Nowzaradan en el 2016. Este le recetó a Christina un estricto plan de dieta y recomendó ejercicio, antes de que pudiera calificar para la cirugía de bypass gástrico.

Cuando perdió suficiente peso para ser aprobada para la cirugía que le salvó la vida, se sintió empoderada.

“Al principio, mucha gente dudaba de mí”, explicó.

Christina Phillips cuenta que su marido se sintió amenazado por su recién descubierta independencia y que él la había estado permitiendo durante todo el matrimonio.

“Estaba en una relación realmente abusiva. Y eso definitivamente, creo, ha tenido un impacto negativo en mí. Duele. En mi corazón, en mi cabeza”.

Aunque no reveló detalles a People de cómo este “abusaba de ella”, es fácil imaginar que le decía las típicas frases que, lejos de ayudar, lo que hacen es empeorar la situación.

“Estás gorda”, “Nadie te va a querer así”, “Solo yo soy capaz de quererte así, tan gorda”, “Nunca vas a bajar de peso”, y otras frases similares son las que a menudo impulsan a la víctima, mujer, a comer más, por la ansiedad y el stress y a no romper la barrera, más que nada sicológica.

Entonces Christina Phillips decidió divorciarse de Zach, quien para ese entonces, dijo a People, se había vuelto insoportable para su felicidad y transformación.

A pesar de la angustia, continuó con la cirugía y perdió 525 libras.

Adaptarse a su nueva imagen

Ahora su problema es otro, pues no se ha adaptado sicológicamente a que ya no es una mujer obesa.

“Últimamente, cada vez que veo que la balanza sube, tiendo a asustarme y dejo de comer durante un par de días”, admitió.

“Sé que no peso 700 libras. Pero todavía me siento así. Y no sé cómo cambiar cómo me siento.”

Christina finalmente se sometió a la cirugía y bajó a 172 libras. Pero…

“Cuando pesaba 700 libras, me sentía inútil y como si no mereciera nada mejor que la vida que tenía. Y ahora mi miedo a subir de peso me ha paralizado. Pero tengo que superar ese miedo si quiero vivir mi vida”, dijo.

Su miedo a aumentar de peso la llevó a desarrollar un trastorno alimentario, pero ha podido superar sus demonios.

“Estoy mucho más feliz ahora. Poder despertarme por la mañana y levantarme de la cama sin sentir que voy a morir, le agradezco a Dios todas las mañanas por eso. Estoy tan bendecida de tener una segunda oportunidad en la vida”.

por Roberto A.

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