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Alejandro Sanz y Rachel Valdés inician la semana con puro ejercicio
Los tórtolos han querido enviar las mejores vibras a sus seguidores en el día que arranca la semana. Valdés y Sanz andan de puro amor, energía y sobre todo mucha cubanía.
Como la pareja activa y feliz que son, Alejandro Sanz y Rachel Valdés le ponen toda la energía posible al inicio de la semana, y de qué mejor manera que haciendo ejercicios. Pero no una rutina cualquiera. La musa del cantante español le pone su toque cubano a todo, por eso no ha podido faltar un fondo sonoro que rápidamente nos remite a una de las mejores agrupaciones que ha dado la isla en los últimos 30 años.
El español compartió con todos sus seguidores en las redes sociales una escena que vuelve a hablar por sí sola sobre lo compenetrados que están él y la pintora de 30 años. Sanz y Rachel aparecen en pleno gimnasio montando lo que el músico define con su característico toque de humor como una “coreografía de extrema complicación”.
Ambos, con ropa deportiva, posaron para un pequeño video que hizo Rachel y subió a sus stories de Instagram este domingo, los dos moviendo el cuerpo al ritmo del tema “Tú me amas (con sabor locura)”, de Habana Abierta.
No obstante el autor de “Amiga mía”, con su tono de humor y sin querer perder una oportunidad para mostrarse feliz con su novia, convirtió la publicación de esta en un post de lunes para arrancar como dios manda.
“Empezamos el lunes con este #Challengue 🕺🏻 Una coreografía de extrema complicación solo apto para bailarines expertos”, escribió el cantautor madrileño.
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Desde que Valdés llegara a la vida del renombrado músico, la cubanía es un componente que no ha faltado en su relación, la cual saliese a la luz el año pasado.
La también escultura no es sólo la novia de Sanz, está considerada como una de las grandes promesas del arte contemporáneo latinoamericano.
Graduada con honores en la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro, en 2010, Rachel acumula una década de éxitos en su carrera, la cual pudo impulsar en parte, gracias a una beca que se ganó en Barcelona. Durante los años que vivió en dicha ciudad, contrajo matrimonio con un prestigioso abogado catalán, con el que tuvo a su hijo, Max, de 5 años, y del que ahora se encuentra divorciada.
Olivia Pérez