1.9 millones recibirá gobierno de Cuba por médicos en Panamá

En Panamá sigue generando muchas preguntas y dudas la contratación de médicos cubanos para enfrentar la pandemia en esa nación y los debates han llegado hasta la Asamblea Nacional de ese país.

Meses atrás, gremios de profesionales de la salud de Panamá se mostraron contrarios a la contratación de médicos cubanos para enfrentar la pandemia en ese país, y todavía su presencia en la nación del istmo genera muchas inquietudes, como se pudo constatar en un debate de la Asamblea Nacional.

“¿Por qué médicos extranjeros si en Panamá hay médicos sin trabajo?, ¿renovarán el convenio?, ¿se les paga directamente?, fueron algunas de las preguntas que formularon los diputados Crispiano Adames, del oficialista Partido Revolucionario Democrático (PRD), y el independiente Gabriel Silva”, indica un reporte del Diario La Prensa.

Los diputados cuestionaron la decisión de llevar a Panamá a más de 200 médicos cubanos, cuya presencia polémica centró este lunes buena parte de la agenda de la Comisión de Presupuesto de la Asamblea Nacional.

Para poder pagar por este contrato, el país destinará $1.9 millones de balboas -moneda equivalente al dólar- correspondientes a tres meses de servicios, fondos que se trasladarán del Ministerio de Desarrollo Agropecuario.

Ante la pregunta de si los profesionales recibirán directamente el dinero por sus servicios, Luis Francisco Sucre, ministro de Salud, reconoció que este irá a parar a manos del gobierno de la isla, pues el acuerdo es de “país a país”.

“En los acuerdos hay una cláusula que dice que puede ser prolongado. Sin embargo, hay que hacer el análisis de la situación (…) para poder tomar esa decisión”, explicó también Sucre sobre si continuarían prestando servicios.

El debate alrededor de los médicos cubanos comenzó en Panamá a finales de diciembre, cuando arribaron a ese territorio una brigada de 220 personas, conformada por especialistas en medicina interna, neumología, cardiología y terapia respiratoria, además de enfermeras y asistentes.

Entonces, la Sociedad Panameña de Cardiología (SPC) indicó en un comunicado sus preocupaciones por la presencia de estos profesionales, y expresaron que estos no suelen cumplir con la formación requerida para la atención intensiva.

Esta organización “manifestó en una carta abierta que se opone a la contratación de médicos cardiólogos del extranjero, que no cumplan con los procesos legales de contratación y ejercicio de la profesión establecidos en el país”, informaba el diario La Estrella de Panamá.

La principal molestia nace del hecho de que en esa nación hay un debate sobre la pertinencia de contratar extranjeros, pues por ley existen decenas de profesiones prohibidas para quien no sea ciudadano, con el objetivo de proteger a los nacionales.

Julio Linares