Tiendas MLC: ¿Y el cable para instalar el split?

En las tiendas MLC, si consigues ahorrar para comprarte el split… viene otro problema: no encuentras el cable para poder instalarlo

Las tiendas recaudadoras de Moneda Libremente Convertible vuelven a estar en el punto de mira por desabastecimiento. Además, los cables Royal Cord, imprescindibles para la instalación de aires acondicionados, no aparecen.

En un recorrido por algunos establecimientos habilitados, nuestro equipo pudo constatar la ausencia total de este insumo, denunciada ya mediante la columna Acuse de recibo del medio oficialista Juventud Rebelde.

“Los splits continúan comercializándose con buena aceptación, a pesar de que ofertamos los más caros. El talón de Aquiles son estos cables: la gente se queja porque no tenemos”, explica una dependiente de Galerías Paseo.

Los trabajadores han adoptado, como medida, avisar al público de la falta y así ahorrarle la cola a quien considere esto un impedimento para la compra. “No podemos hacer más nada. La solución no está a nuestro alcance. Sencillamente no han entrado desde el último envío, hace dos meses”, añade.

A pesar de todo, los clientes continúan comprando. “Lo importante es tener el aire, lo demás se resuelve. Eso sí, la culpa de que no haya es de los mismos vendedores de la tienda. ¿Cómo allá afuera sí tienen?”, reclama Dalia, ama de casa.

En efecto, los buquenques de la puerta pueden ofrecerte el ingrediente final. “Mi punto los tiene a 2 CUC, pero si compras más de cincuenta metros puedo dejártelo en 1.60”, me ofrece uno.

En Nela, donde la situación es muy parecida, Armando, uno de los tenderos, me espeta: “Nuestro personal está cansado de ser responsable de todo. No tenemos derecho a negar una venta, por lo cual, si viene el revendedor y pide mil metros de cable debemos dárselo. El coto es cosa de las autoridades”.

El valor del cordón en el mercado estatal es de 0.95 CUC, por lo cual la “búsqueda” es muy buena para los particulares.

Anthuan, del equipo refrigeración ICEXPERT, asegura tener sus propios proveedores. “Siempre encargo ese material a las mulas, pues mi negocio lo necesita y no podemos estar parados por escasez. Mucho antes de estas tiendas, nosotros prestábamos servicios de montaje, mantenimiento y reparación, con nuestros propios insumos. Así que, si ahora no hay, es culpa del Estado por ingresar cantidades insuficientes”.

Las pugnas por definir los culpables no cesan, mientras la gente asume soluciones costosas. “Iba a instalar el aire con ayuda de mi hijo, pero ahora debo pagar 50 CUC para que otra gente lo haga. ¿Por qué?”, se cuestiona Miguel Suárez, cliente de La Habana Vieja, quien tiene un título de técnico medio en refrigeración.

María Carla Prieto