Aparición reciente de Humberto López en la TV fue “coyuntural”

Una fuente de entero crédito afirma que “de arriba” mandaron a darle bajo perfil en la televisión a Humberto López y Lázaro Manuel Alonso, para tratar de no seguir generando antipatía hacia ellos.

En menuda situación se encuentran ambos. Se han convertido en la imagen de un mensaje de odio que otro, desde arriba, les ordenó.

A más de un curioso le causó asombro la reaparición de Humberto López, el pasado 27 de enero en la televisión cubana. Humberto, al igual que Lázaro Manuel Alonso, llevaban días perdidos del vidrio, un hecho que no pocos comenzaron a comentar en las redes sociales y que dio lugar a un sinnúmero de teorías.

Ambos se han convertido en los últimos tiempos en las dos figuras más odiadas dentro del Sistema Informativo de la Televisión Cubana, entre un sector de los cubanos; y los más respaldados por parte de otro. Entre los que los respaldan los hay sinceros, pero también los hay “de ocasión”; gente que no le importa en lo más mínimo si Humberto o Lázaro respiran o se alimentan, pero son del Partido o de la UJC y recibieron la orientación de apoyarlos.

Es en parte a ese “odio” que han despertado ambos, y no a vacaciones ni nada que se le parezca, que tanto Humberto como Lazarito han pasado a ejercer otras “funciones”. Siempre, claro, con la anuencia del Papa, y no me refiero al Papa Francisco.

Una fuente que ha pedido anonimato conversó con este redactor para decirnos que “de arriba” mandaron a darle “bajo perfil por ahora” en la televisión tanto a Humberto López como a Lázaro Manuel Alonso.

A la pregunta de “por qué se le había visto entonces el 27 de enero” respondió que fue una situación “coyuntural”.

“Necesitaban dar cierta firmeza y él es el “especialista”. Tuvieron que mandar a buscarlo”.

La fuente, psicóloga y especialista en medios de comunicación, quiso resaltar la diferencia entre el Humberto López confiado y con voz más tranquila, al Humberto López “nervioso” y hasta gritón del pasado 27 de enero. Según conoce ella, Humberto se siente “molesto” en la cuadra donde está viviendo, de manera ilegal, en Jaimanitas, porque hay varias personas que no lo miran bien.

Asegura, sin embargo, que el que más miedo tiene es Lázaro Manuel Alonso, de quien dijo que estaba “cagado literalmente”.

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“No están separados, van a volver, cuando todo esto se calme, porque temen por ellos; y ellos mismos temen”, explicó sobre los controvertidos comunicadores, que se han ganado miles de enemigos tras continuas apariciones en la televisión cubana mintiendo, difamando, tergiversando y que como es lógico en casos así, provocaron que no pocos amigos y vecinos que los conocen demasiado bien los desenmascararan ante la opinión pública. En “la cruzada” a Lázaro Manuel le sacaron unos chats privados, recientes, en los que le cuenta a una amiga que le va mal en la televisión en Cuba y solapadamente se le insinúa sobre un futuro en otro lado.

Sandro Nieto

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