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El dueño de un restaurante de Nueva York, que frecuentaban Jeffrey Epstein y Harvey Weinstein, le  prendió fuego a una mesa donde solían sentarse ambos, como señal de protesta ante los hechos por los cuales ambos fueron acusados y juzgados en tribunales de los EEUU, según ha informado la cadena CNN. La culpa del primero, la pedofilia; la del segundo, el acoso y abuso sexual.

Zach Erdem, el dueño de 75 Main en Southampton, dijo que quería borrar sus nombres de la historia de su restaurante.

Epstein se encontraba a la espera de otro juicio por cargos federales que lo acusaban de abusar sexualmente de niñas menores de edad, fue encontrado sin vida en su celda en el Centro Correccional Metropolitano de Nueva York en agosto de 2019.  Weinstein, un exproductor de Hollywood, fue sentenciado en marzo pasado a 23 años de prisión después de ser declarado culpable de cometer un acto sexual criminal en primer grado que involucra a una mujer y violación en tercer grado que involucra a otra.

“Cuando visitaban 75 Main, los dos solían cenar en la Tabla 1, expresó Erdem a CNN.

“Cuando lo pensé, como Jeffrey Epstein solía sentarse en esta mesa, todo lo que podía pensar era que necesitaba quemar esta mesa y asegurarme de que nada manchara mi restaurante”, dijo Erdem, de 39 años, al prestigioso medio informativo.

“Agarré mi martillo, un poco de combustible; la rompí, la quemé y la tiré a la basura. Me sentí tan bien en realidad. Ahora ya no tengo que pensar en estos tipos”.

Erdem, rodeado de residentes locales y camareros, dijo que rompió la mesa con un hacha y un mazo antes de mojarla con combustible y encenderla mientras la gente vitoreaba y gritaba “¡Arde, Epstein, arde!”

Erdem dijo que lo hizo para enviar un mensaje claro a todos los que planean visitar 75 Main: “Las personas que abusan de las mujeres no son bienvenidas aquí”.

por Roberto A.

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