¿Manzanillo o Venecia? Diluvio azotó la ciudad granmense

La ciudad de Manzanillo se vio azotada este lunes por unas impresionantes inundaciones que no se habían registrado allí en años. Las calles de la ciudad se convirtieron en un río y obligaron a evacuar a vecinos desprevenidos.

En la tarde de este lunes en Manzanillo, segunda urbe más importante de Granma, llovió de forma ininterrumpida por más de tres horas y 30 minutos. Las calles se convirtieron en un río que fluía con gran caudal, como se pudo apreciar en numerosas fotografías compartidas en redes sociales.

Desde hacía más de cinco años no se vivían semejantes inundaciones en ese territorio oriental de la isla, como amplía un reporte de la emisora Radio Rebelde, que da cuenta de los angustiosos momentos que vivieron en ese asentamiento.

Durante el tiempo que duraron las impresionantes lluvias se precipitaron 94,5 milímetros de agua y ocurrió una racha de viento de 58,0 kilómetros por hora en dirección este-sudeste, a las 5 y 20 pasado meridiano.

“La precipitación de ayer la provocó un denso banco de nubes convectivas estacionado sobre la ciudad, y que en el transcurso de la tarde se desplazó hacia el mar”, indicó a la emisora oficialista Yanoski Rondón Batista, especialista de la estación meteorológica.

“Semejantes números califican lo sucedido aquí como una lluvia torrencial al sobrepasar los 60 milímetros de agua, que provocaron inundaciones de calles, viviendas e instituciones estatales, según la definición que le confiere la Organización Meteorológica Mundial (OMM)”, añaden.

Las imágenes de las cuentas de Facebook de CMKX Radio Bayamo y de algunos usuarios permiten ver los impresionantes caudales de agua que corrían por las arterias de la comunidad -como en la avenida Primero de Mayo- convertidas en vías acuáticas.

Como resultado de las precipitaciones, se reportaron derrumbes de viviendas, cortes del servicio eléctrico y la evacuación de algunas familias hacia casas de vecinos, en lugares más altos.

Algunos con décadas de habitar en la ciudad afirmaban en los comentarios de los distintos posts que nunca habían vivido nada parecido a este diluvio que, por un rato, casi convierte a Manzanillo en una pequeña Venecia.

Omar Cortázar