Las icónicas palmeras de Florida están amenazadas de muerte

“No creo que todas las palmeras de Florida mueran, pero el problema que vemos empeorará mucho antes de mejorar”, expresó un reconocido endomólogo.

La agencia AP reveló esta mañana que “las icónicas palmeras de Florida están siendo atacadas por una enfermedad mortal”.

Según AP, el problema ha pasado de ser “una pequeña infestación en la costa del Golfo de Florida a un problema casi estatal en poco más de una década”. ¿El responsable? Un pequeño insecto, del tamaño de un grano de arroz.

Sin embargo, la capacidad “saltarina” de este insecto lo ha llevado a saltar de planta en planta, reproducirse en un número asombroso y que, para colmo de males según señala AP, viene a sumarse a otras dos enfermedades que ya han estado afectando a este emblemático árbol.

Parece difícil de creer, pero este insecto puede secar las hojas y penachos de estas palmas en meses. AP expresa que no hay posibilidad de recuperación una vez que se enferman, y que la única solución posible, es desenterrar la mata.

‘Tener esta enfermedad bajo control es esencial porque tiene el potencial de modificar drásticamente nuestro paisaje”, dijo Brian Bahder, un entomólogo que estudia las enfermedades de las plantas transmitidas por insectos.

“No creo que todas las palmeras de Florida mueran, pero el problema que vemos empeorará mucho antes de mejorar”, expresó Brader.

¿Cómo identificar una palma enferma?

La característica más visible es una especie de bronceado que adquieren las hojas, antes de secarse completamente y caer al suelo.

El insecto, según los expertos, muy probablemente se originó en México. También se encuentra en partes de Texas y en todo el Caribe. La enfermedad ya ha dañado gravemente las plantaciones de coco en Jamaica, y Brasil está tomando medidas preventivas para evitar la invasión. Algunos temen que migre a California y Arizona, infectando las palmeras y dañando el cultivo de fruta.

AP expresa que “la primera aparición en la Florida se produjo cerca de Tampa en 2006”. Sin embargo, ahora se encuentra desde los Cayos en el sur hasta Jacksonville en el norte.

La enfermedad se transmite únicamente por el haplaxius crudus, un pequeño insecto alado llamado a veces cixido de la palma americana o, genéricamente, un saltamontes. Estos chicharreros específicos (hay otros tipos) inyectan la bacteria a través de su saliva cuando se alimentan de la savia de las hojas de una palma. Cualquier cixido de palma que luego se alimenta del árbol recogerá la infección y transmitirá la bacteria a más palmas.

“Una vez dentro de un árbol, las bacterias migran a su base, multiplicándose hasta obstruir el sistema circulatorio, al igual que las arterias humanas se bloquean por la grasa y el colesterol. El bloqueo hace que sea imposible para las células del árbol obtener suficientes nutrientes y azúcares, hambrientos. Cuando un árbol infectado muere, sus frondas y la hoja central de la lanza se transforman de verde a un tono de bronce revelador a medida que sucumbe en unos seis meses.”

La enfermedad, que no infecta afortunadamente a humanos ni a animales, puede haber llegado a la Florida, según la hipótesis de Bahder con los vientos traídos por el huracán Wilma en el año 2005. El evento, cuya trayectoria se inició al sur del Mar Caribe, bordeó las costas de Yucatán y atravesó la Florida, hasta luego “morir” en el lejano Atlántico Norte. Los insectos, rápidamente atacaron a los árboles de Tampa; luego, otros vientos arrojaron los insectos a nuevos territorios, o incluso, “viajaron en auto”.

Hasta ahora, lo único efectivo que existe contra el saltamontes es una inyección, que cuesta $50 dólares y que es efectiva en la planta durante un plazo de apenas 3 meses, lo cual la hace incosteable para la mayoría de los propietarios de terrenos que se dedica exclusivamente a la siembra de palmas.

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