Jóvenes cubanos llaman a tomar las calles y el gobierno los reprime

No quieren enterarse de que el miedo cada vez es menos. Los jóvenes que llamaron a tomar las calles lo hacían en solidaridad con Luis Manuel Otero Alcántara

El primer post fue en el perfil de Facebook de la activista Anamelys Ramos. Avisaba de que algunos se estaban concentrando en el parque localizado frente a la termina de trenes, en La Habana Vieja. Que era hora de tomar las calles todos los que quieren otra Cuba.

Luego la propia Anamelys, en un post posterior, decía:

“Hermanos cubanos!!! Vivir sin dignidad no es vivir! Vamos a la calle por los derechos e todos, por los anhelos postergados, por nuestras familias, nuestros hijos. Porque necesitamos y merecemos un futuro. En la Habana Vieja hay cubanos esperando. #DerechoATenerDerechos #todossomosartistas #SOSCUBA #TodosSomosLuisManuel #CubadeTodos”

Poco tiempo después se conoció que la policía política había arrestado a la artista Camila Lobón y a la poetisa Katherine Bisquet.  Llevaban un cartel, en el habanero Boulevard de San Rafael, cuando fueron detenidas luego de arrancárselo. También apresaron a la activista Yamilka Lafita, que filmaba la acción.

Fuerzas policiales también secuestraron a los periodistas independientes Esteban Rodríguez, Héctor Luis Valdés Cocho y a Yunier Gutiérrez. A otros activistas, artistas y colegas de medios independientes les mantenían sus casas sitiadas. Cuando soltaron a Bisquet y Lobón, ellas mismas en sus redes sociales anunciaron que las liberaron bajo medidas cautelares.

Cada uno de los cubanos que ayer salieron a las calles lo hicieron con solidaridad con Luis Manuel Otero Alcántara, en huelga de hambre y sed desde el pasado domingo. Hoy en El Estornudo se ha publicado “Charla 2 con Luis Manuel Otero: opongo mi soledad plena a la multitud vacía de afuera“, la segunda de las crónicas de Anamelys Ramos.

En una parte del texto puede leerse esta respuesta de Otero Alcántara: “Me dolía un poco la cabeza y tú sabes que uno se va poniendo débil, pero estoy fresco. El ambiente sí creo que ha cambiado. Tengo mi microcosmos aquí. Estoy habitando el lugar de manera diferente. Algo me acompaña. Pero igual quiero permanecer solo, al menos por ahora. No quiero a nadie presionando”.

Neus Francino