Inseguridad para peatones en transitada vía del Vedado habanero

Texto y fotos: Lucía Jerez

Se ignora por qué ha sido destruido el parque de Línea y L, en el Vedado habanero. Este cruce es hoy muy inseguro para los peatones

La intersección de las calles Línea y L es de las arterias más importantes y transitadas del Vedado habanero y deviene un punto donde convergen autos y peatones, dirigidos por las luces del semáforo de la esquina.

Justo en ese lugar existía un pequeño parque, el cual, además de tener un valor estético y bancos donde se sentaban las personas, funcionaba como senda. Sin embargo, se desconoce la razón por la cual el espacio fue destruido en su totalidad. Lo que antes era una senda para caminantes, ahora constituye un área desierta poblada de escombros y piedras que imposibilitan el paso.

La situación es tal que quien camine por Línea, cruce L, y pretenda continuar en línea recta rumbo a Malecón, al no existir un paseo alternativo, deberá hacerlo por el filo de la avenida, corriendo el riesgo de ser lesionado por un auto, pues si bien la arteria es relativamente amplia, el número de quienes hacen este recorrido también es grande y muchas veces coinciden en el pequeño espacio del contén.

Cabe añadir que en esa esquina radica un mercado de comida en divisa, el cual suele ser bastante concurrido, y del que los clientes salen con bolsas que hacen engorroso el tránsito por el margen de la vía.

Rosa tiene 79 años, es vecina de la zona y su edad, unida a otros achaques, la ha obligado a llevar un bastón en su mano derecha. “Yo tengo que dar la vuelta para subir e irme por otra calle, porque me es imposible caminar por ahí, y me pone nerviosa sentir a los carros tan cerca”.

“Tiene que existir un motivo fuerte o muy necesario para desbaratar algo que favorecía tanto la imagen del lugar como a los ciudadanos. Dejar eso lleno de escombros y crear una situación tan incómoda. Yo soy joven y a veces no sé cómo voy a pasar. Imagino los ancianos”, comentó una muchacha.

Según el artículo 138 del Código de Viabilidad y Tránsito de Cuba, el peatón, entre otras cosas, está obligado a cumplir las reglas siguientes:

1. Caminar por una acera o paseo dentro de los perímetros urbanos por el lado derecho de la dirección en que transite.
2. Circular por la calzada lo más próximo posible al contén de la acera o borde de la misma, cuando lleve un objeto voluminoso que entorpezca la circulación de otros por la acera o paseo, tomando las precauciones necesarias.
3. No circular apareado a otro peatón en el mismo sentido de su dirección en las aceras de hasta un metro de ancho.
4. En la vía comprendida en los perímetros urbanos en las que no es posible utilizar la acera o paseo, o estos no existan, a circular por la calzada, lo más próximo posible al borde de la misma en una sola dirección.

Aunque la ley contempla la aparición de este tipo de casos, es necesario tener en cuenta que la isla tiene la población con mayor envejecimiento de América Latina y el Caribe, y para los de la tercera edad resulta inseguro el andar por la orilla de una calzada tan circulada como esta.

En tiempos donde el discurso oficialista incentiva la cultura del detalle y el pensar como país, sería pertinente antes de ejecutar una orden preguntarse quiénes saldrían afectados, o crear alternativas para que las molestias sean menores.