Ineficaz nueva bonificación de la banca cubana para compras con tarjeta magnética

Texto y fotos: María Carla Prieto

En Cuba se contabilizan más de cinco millones de tarjetas magnéticas, aunque solo una tercera parte de la población las utiliza. Los descuentos por las compras no son entonces tan efectivos

Desde ayer 10 de octubre y durante tres días, los clientes del Banco Nacional de Crédito y Comercio recibirán un regalo. Con motivo de conmemorarse el aniversario 59 de la nacionalización de la banca y el día del trabajador de ese sector, quienes paguen sus compras y servicios utilizando la tarjeta magnética recibirán un 10 por ciento de descuento del monto total adeudado.

El pueblo cubano, ajeno totalmente a este tipo de promociones, se muestra jubiloso y considera necesaria su difusión: “Lo han puesto en los periódicos, pero deberían ponerlo más, hacer un spot de televisión o algo”, me comenta un joven a la salida de un mercado.

Según un comunicado oficial de la entidad, la medida beneficiará a personas naturales cuyas cuentas se asocien al ahorro, el pago de salarios, jubilaciones, estímulos y pensiones.

Colas infernales en los cajeros automáticos

Mientras consulta su saldo en el cajero, Juana celebra: “No sé cuánto será aunque me parece que no mucho. De todas maneras es un dinerito ahorrado y puedo usarlo en otras cosas”.

Desde hace unos años, en Cuba se promueve el uso de las tarjetas magnéticas con el objetivo de potenciar el comercio electrónico. Parte de la iniciativa es la facilidad de pagar los servicios básicos, como el agua, la electricidad y el gas manufacturado, entre otros.

Igualmente, el gobierno exigió a los cuentapropistas crear cuentas de ahorro en las unidades bancarias nacionales, a fin de poseer un mayor control de los ingresos personales.

No obstante, disposiciones y facilidades no terminan de convencernos, pues muchos preferimos utilizar el cash por obvias razones. “Hay pocos cajeros automáticos. Diariamente las colas son infernales para sacar dinero aquí, en 23 y J, uno de los lugares con mayor concentración de estos artefactos”, explica Guillermo, trabajador del agromercado.

En efecto, la distribución de estos aparatos en el municipio Plaza de la Revolución es lamentable. Se encuentran ubicados en las principales arterias de este municipio, y su localización se dificulta en el resto de los barrios.

Por si esto no fuese suficiente, el estado técnico no es el óptimo. “Lo mismo te tragan la tarjeta que no funcionan. Es normal llegar a un sitio donde hay muchos, y solo trabajan tres. Otros no tienen dinero o solo billetes grandes. Si te hacen falta 125 CUC tienes que irte con 100. Todo muy incómodo”.

Inconvenientes de tal índole invalidan la efectividad de la promoción. De acuerdo con datos del Banco Nacional de Crédito y Comercio, en Cuba se contabilizan más de cinco millones de tarjetas magnéticas, aunque solo una tercera parte de la población las utiliza.