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Un hombre en California salió de compras y se cubrió su cara nada más y nada menos que con una capucha del Ku Klux Klan, a modo de “máscara facial”, lo cual generó sin dudas problemas en la tienda a la cual entró.

A los residentes de San Diego se les había exigido que se cubrieran la cara en público, y a este infeliz no se le ocurrió nada mejor que ir a comprar comestibles con una capucha Ku Klux Klan.

El encapuchado fue visto deambulando por los pasillos de un supermercado Von en la ciudad de Santee, en el condado de San Diego, informó el San Diego Union-Tribune.

Por suerte los problemas que generó su desafortunada forma de seguir al pie de la letra las ordenanzas de la ciudad,  no fueron graves. Cuando los empleados de la tienda le pidieron repetidamente al hombre que se quitara el capó o abandonara el local, según dijo la portavoz de la compañía, Melissa Hill, al periódico, el hombre finalmente se quitó la capucha, compró sus artículos y se fue.

“En Vons, fomentar un ambiente de cortesía, dignidad y respeto es una de nuestras principales prioridades, y trabajamos arduamente para que todos en nuestras tiendas cumplan con estos estándares, incluidos los clientes'”dijo Hill.

“San Diego es #NoPlaceForHate”, dijo en Twitter Tammy Gillies, directora regional de la Liga Anti-Difamación en San Diego.

El alcalde de Santee, John Minto, y los residentes dijeron en las redes sociales que las acciones del hombre no representaban los valores de la ciudad de casi 60,000 residentes.

“Muchas gracias a todos los que dieron un paso adelante para reducir este triste recordatorio de intolerancia”, dijo Minto.

“Santee, sus líderes y yo no toleraremos tal comportamiento”.

Mensajes como “repugnante”, “abominable”, “inquietante”, fueron vistos en las respuestas en Twitter, y en condenas hechas por algunos de los políticos locales.

Sin embargo, por terrible que parezca – y esto es especulativo – este tipo de incidentes muy bien que pudiera darse en gente que desconoce absolutamente la historia, y esto es muy común hoy en día entre los jóvenes fundamentalmente.

Estudio del Holocausto: dos tercios de los millennials no saben qué es Auschwitz

Una investigación realizada por la periodista Julie Zauzmer, y publicada en febrero de este año en el Washington Post, refleja que dos tercios de los millennials estadounidenses no pueden identificar qué es Auschwitz.

El estudio fue publicado precisamente el Día del Memorial del Holocausto, genocidio que mató a 6 millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial. El recuerdo de este triste acontecimiento “se está desvaneciendo rápidamente entre los adultos estadounidenses, especialmente entre las edades de 18 a 34 años,” señaló la periodista.

El estudio, realizado por la Conferencia sobre reclamos de material judío contra Alemania, entrevistó a 1.350 adultos estadounidenses en febrero. Cuando se les pidió identificar qué es Auschwitz, el 41 por ciento de los adultos estadounidenses en general y el 66 por ciento de los millennials no pudieron encontrar una respuesta correcta que lo identificara como un campo de concentración o campo de exterminio.

Dicho en cifras: el 22% de la generación del milenio dijo que no había oído hablar del Holocausto o no está seguro de si lo han escuchado, el doble del porcentaje de adultos estadounidenses que dijeron lo mismo.

El Museo Conmemorativo del Holocausto de EE. UU. dice que al menos 1.3 millones de personas fueron deportadas al campamento, dirigido por la Alemania nazi en la Polonia ocupada, desde 1940 hasta 1945, y 1.1 millones de ellas fueron asesinadas. Fue el campo de concentración más grande entre muchos construidos por los nazis durante su campaña para acabar con los judíos y otros grupos, pero en EE.UU., según esta encuesta, la gente no sabía qué diablos era.

Así que, no os asombreis, si alguien en EE.UU. no sepa qué es el Ku Klux Klan, o cuánto daño hizo.

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