Familia de Florida descubre serpiente en la secadora

Una serpiente en la secadora fue la desagradable sorpresa que se encontró una familia en Florida, cuando llamó a los especialistas para que le arreglaran el aparato.

Pensaban que la máquina presentaba problemas de funcionamiento y llamaron a los mecánicos para que la revisaran, pero una familia de Florida descubrió una serpiente en la secadora, la verdadera causa de sus dificultades.

El portal Click Orlando cuenta que en el hogar de los Pring habían tenido problemas con la lavadora desde el jueves pasado, pues soltaba una excesiva cantidad de pelusas y no trabaja correctamente.

Convencidos de que estaban ante un mal funcionamiento de la misma, decidieron llamar el fin de semana a Sea Star Air and Appliances, un negocio familiar que se dedica a la instalación y reparación de todo tipo de servicios de aire acondicionado y de electrodomésticos.

A su auxilio acudió un técnico, Darrell Cobble, quien llegó al hogar de la familia de Florida, ubicado en Groveland -ciudad del condado de Lake-, pensando que se trataba de una simple reparación que no le llevaría mucho tiempo.

“Salió diciendo que probablemente había algo atascado en el motor y que era fácil de arreglar”, contó Alyson Pring.

Pero cuando empezó a revisar a fondo, explica la mujer que simplemente se puso de pie y salió caminando hacia ellos. Entonces dijo que había una serpiente en la secadora, la cual, para su suerte, estaba muerta ya, como permite ver un video en redes sociales.

El técnico Darrell Cobble explicó al citado medio que “no es algo que normalmente encuentres allí, pero las encuentras. En el exterior, normalmente tienen una rejilla que evita que entren. No tenía una, así que encontró su camino”.

“Podría haber sido mucho peor, pero me alegro de que estuviera muerta. Ya la máquina está arreglada y lista para funcionar”, afirmó la mujer.

Meses atrás, se hizo famoso el caso de la floridana Emily Visnic, de West Palm Beach, quien encontró dentro de su lavadora una enorme pitón birmana, que al principio confundió con ropa.

“Miré hacia abajo y vi algo de piel de serpiente, y pensé, ‘Eh, ¿qué puse aquí que fuera piel de serpiente?’. Me agaché y empezó a deslizarse. Oh, Dios mío, ‘grité tan fuerte’. Era una pitón enorme”, refirió entonces.

No obstante, en aquella ocasión sí se trataba de un animal vivo y no muerto, como ocurrió con la serpiente de los Pring.

Julio Linares