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Cuba

Cubanos abarrotan tiendas en dólares para comprar equipos electrodomésticos  

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Texto y fotos: Ariel Peñate

Largas colas en las tiendas en dólares. Algunos saben ya qué electrodoméstico comprarán, a otros los anima la curiosidad

Las tiendas cubanas habilitadas para vender productos electrodomésticos en dólares estadounidenses, entre otras monedas, están abarrotadas desde bien temprano en la mañana. Se ven largas colas de personas, algunos han llegado hasta estos establecimientos para adquirir algún equipo o sencillamente los mueve la curiosidad.

“Yo estoy aquí desde las 8:00 para comprobar la calidad de las ofertas y comprarme, si me resulta económico un Split de 1 tonelada. Tenía el dinero guardado hace meses para comprarlo en Revolico, pero en estas tiendas me ahorro casi la mitad del dinero”, dijo Elizabeth Pérez, una cubana de 35 años, que encabeza una fila de más de 100 personas en la tienda Galerías Paseo de La Habana.

“Yo me abrí la cuenta en el banco, pero no deposité efectivo en ese momento. Cambié los CUC a dólares sin perder nada, con un amigo que vino de Estados Unidos. Me molesté bastante cuando el banco me impuso el gravamen del 10 por ciento. No entiendo ese mecanismo, pero no tenía otra opción,  porque no tengo familia en el exterior que me pueda mandar dinero”, explica.

Este lunes abrieron 13 establecimientos comerciales donde los cubanos pueden adquirir con tarjetas magnéticas respaldas por cuentas bancarias en USD, entre otras divisas, equipos electrodomésticos como refrigeradores, televisores de alta gama, freezer, Split, motos eléctricas, lavadoras, así como piezas de carros y otras ofertas. Las tiendan venden, en su mayoría, dos equipos electrodomésticos por persona.

Hasta el momento gran parte de estos productos eran importados desde el exterior por las llamadas “mulas”, un negocio floreciente que podría haber recibido un tiro de gracia por las nuevas medidas del gobierno.

cartas desparramadas por accidente

“Esto es lo más parecido a un Walmart que veré”

En la tienda habilitada en el centro comercial de El Focsa, en el Vedado capitalino, los usuarios llenaban el local. Algunos iban directamente a comprar la mercancía y otros no tenían una idea muy clara de qué adquirir.

Entre ellos había un adolescente de unos 17 años que se hizo llamar Alberto. El joven estaba acompañado de otros compañeros del preuniversitario y quería ver “un televisor de 65 pulgadas y las motos eléctricas”.

“Nosotros nos escapamos del pre para venir a la tienda. No se habla de otra cosa en Cuba desde hace semanas y creo que esto es lo más parecido a un Walmart que veré, al menos por el momento. Mi familia no puede costearse uno de estos equipos de lujo, pero yo si quería pasar por la tienda para poder verlos”, refirió Alberto.

Los cubanos pueden crear las cuentas poniendo directamente divisas o sin realizar depósitos. Desde que el gobierno de Díaz Canel anunció esta medida más de 10 000 personas acudieron a bancos para crear cuentas y solo más del 13% ha dejado efectivo, según medios oficialistas.

Entre los productos más demandados se encuentran los Split de una tonelada a 360 USD -cuyo precio ronda aún los 600 o 650 CUC en Revolico- y los refrigeradores de grandes dimensiones. No se puede elegir entre una gran variedad de marcas, priman Royal o Sankey.

“Me gustaría poder ver más marcas en competencia para elegir las de mi preferencia. Me preocupa que me salga con defectos el Split que me voy a comprar, pero el gobierno ha dicho que se respetará la garantía, incluso que se devolverá el dinero en caso de que no se pueda arreglar o sustituir el equipo. Espero que sea verdad”, manifestó uno de los clientes en la cola del Focsa.

Para vender los productos electrodomésticos se han habilitado cinco tiendas en la capital cubana. Pero entre las más visitadas están la de Tercera y 70, en Playa, Focsa y Galerías Paseo, en el Vedado. En esta última, la cola se hacía interminable y varias personas, después de comprar, estaban en las afueras de la tienda esperando su transporte para trasladar la mercancía o alquilando carros para hacer la “operación”.

Uno de los taxistas que merodea por Galerías Paseo nos asegura haber “hecho el día” desde que abrió la tienda. “Ya he dado como seis viajes a destinos bastante cercanos con refrigeradores, Split y televisores. Si el nivel de compras sigue de esta manera creo que tendré un fin de año por todo lo alto”, bromea el conductor de una pequeña camioneta.

No obstante, algunos usuarios se han quejado de los trámites burocráticos para acceder a los productos. Víctor, un cliente de unos 45 años, no pudo comprar las gomas de su carro. “Cuando fui en la mañana me dijeron que se habían acabado. No entendí como en apenas tres horas pudo acabarse. Ningún negocio en el mundo puede funcionar así. Espero que sea solo la mala organización de un día y no se extienda durante esta semana porque entonces sería un mal chiste”, expresó.

Algunos cubanos no se fían

No son pocos los que han tenido dudas en abrir las cuentas porque temen que luego no puedan sacar los dólares depositados o que las autoridades comiencen a investigar cómo consiguen las divisas. “El gobierno cubano necesita dólares como sea y la apertura de estas tiendas responde completamente a eso. Si me envían dinero desde el exterior a mi cuenta o yo mismo deposito quizá me pongan muchas trabas para extraer ese dinero si lo necesito de forma urgente o tenga que viajar. En mi caso yo seguiré guardando divisas en mi casa y comprando los equipos que necesite cuando viaje al exterior. No me fío”, admite Alejandro, un joven diseñador que viaja con frecuencia a países como México, Estados Unidos y Panamá.

Alejandro aclara asimismo que los precios a estos equipos electrodomésticos siguen “multados” en comparación con su costo en otras naciones del continente. Lo más económico son los Split, pero el resto superan por mucho el precio en países como Panamá. “Lo que sí es cierto es que le tumbaron el negocio a las mulas, que ahora solo se podrán dedicar a traer ropa y productos de aseo para revender”, reconoce.

Sobre las 2: 00 de la tarde la cola en Galerías Paseo sigue siendo inmensa. Un empleado deja entrar un grupo de 3 o 4 clientes y detiene el paso al resto. Las personas se incomodan. Lo increpan. “Yo solo cumplo órdenes y me dijeron que no podía dejar que las tiendas se llenen”, responde.

“Ni con dinero uno puede comprar las cosas con tranquilidad. Yo vengo a comprar un Split y estoy hace ya casi tres horas afuera de la tienda. Creo que en cualquier momento me voy y regreso cuando pase el furor de los primeros días. Verás que luego estos equipos van a estar ahí durmiendo el sueño eterno y tendrán que bajarles los precios. Cuando la novedad pase ya todo volverá a la normalidad. Y espero también que bajen más los precios porque la mayoría de los cubanos no pueden ni soñar con comprarse uno de estos equipos”, indica.

Un economista consultado por Cubacomenta, bajo la condición de anonimato, argumenta que esta es una medida casi desesperada para recaudar divisas, pagar deudas que tiene Cuba con otras naciones y tratar de buscar vías para poder enfrentar las nuevas medidas económicas impuestas por Donald Trump, que buscan asfixiar económicamente al gobierno cubano. “Pero no debe ser una estrategia muy efectiva porque los cubanos no dejarán en las arcas del gobierno una gran cantidad de dólares. El resultado se verá luego del primer mes y luego tendrán que tomar otras medidas para salir de la aguda crisis económica. Si no le dan luz verde a los emprendedores y abren la economía a otras fuentes de ingresos, seguirán dando gritos de ahogado”, concluye.

 


 

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