Connect with us

Published

on

Un residente en la Isla de la Juventud dijo que en EE.UU. no se hacía cola para comprar y fue delatado a la policía por “hablar mal de la Revolución”.

Tal vez los cubanos recuerden con claridad y memoria el día en el que la periodista Irma Shelton Tassé salió en el Noticiero Nacional de Televisión diciendo que en EE.UU. se estaba acabando la carne y que en los supermercados y bancos de alimentos había largas colas para adquirirlos. René Alberto López Cossi, residente en la Isla de la Juventud, tal vez lo recuerde; y hasta con amargura recuerde también que “decir lo que dijo” le costó una paliza de las Fuerzas Especiales, un arresto, un juicio sumario y quizás, muy pronto, cárcel.

Todo sucedió en la Isla de la Juventud. René Alberto López Cossi se encontraba haciendo una cola para comprar pollo y champú, en Nueva Gerona, cuando dijo que en Estados Unidos no se hacían colas para comprar alimentos.

Una vieja chivatona -perdón por la “vulgaridad” pero eso es lo que es “esa anciana” que lo echó para alante como un carrito de helado– llamó a la policía y lo delató. Aseguró que René “estaba hablando mal de la Revolución”. Suficiente.



En la tienda se aparecieron efectivos de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y del Ejército (las llamadas Boinas Rojas) de la Isla de la Juventud. Instantes después lo detuvieron y golpearon.

Eso ocurrió el pasado 5 de noviembre; y si se conoció de lo sucedido, ese mismo día, fue porque algunos presentes grabaron con sus teléfonos celulares lo sucedido.

Varios videos circularon por la web que mostraban el arresto del pinero René Alberto López Cossi.

Las imágenes muestran a un grupo de personas que reprochaba el violento incidente. Todos, presentes en la cola, seguramente presenciaron lo que dijo René y tácitamente lo aprobaron o no, pero ver como era detenido por los militares, con violencia y golpes, seguramente mereció que la repulsa fuera unánime.

En los videos se les escucha decir “abusadores”, “asesinos” y  hasta hubo uno que se atrevió a más y dijo “abajo la dictadura”.

La injusticia exasperó los ánimos. Tanto que hasta se aparecieron en el lugar las llamadas “Avispas Negras” o “Boinas Negras”, un “estadío superior” en la cadena represiva.

René fue sacado de allí; la vieja chivatona adquirió su pollo y el champú, y el resto de las personas también compraron. Todos marcharon a casa. La mayoría convencidos de haber sido testigos de una injusticia.



Esta, no terminó allí. A René, ahora, le hicieron un juicio sumario. Decir que en EE. UU. no se hacen colas, se convirtió en presuntos delitos de atentado, desacato y desorden público.

El juicio sumario se celebró este lunes 16 de noviembre.

La periodista Camila Acosta, en Cubanet, nos dice que René estuvo “cuatro días detenido en la unidad de la PNR del municipio especial Isla de la Juventud”.

“En todo ese tiempo estuvo incomunicado y ni siquiera le permitieron ver a un médico para que le revisara y atendiera los golpes recibidos”, reseña Acosta en su artículo, que recoge además como René no pudo contar con representación judicial, por lo cual se violó así su derecho a la defensa.

“Tampoco le permitieron presentar testigos, ni siquiera los pocos que logró reunir en ese escaso tiempo, de más de una veintena que existían. Fue acusado de atentado, desacato y desorden público”, expresa más adelante Acosta.

“Apenas dio tiempo de preparar la defensa, esto lo hacen para ellos (la Seguridad del Estado cubana) poder violar, aún más, todo. El juicio fue un circo, algo planificado. La fiscal ni siquiera aceptó poner en el acta que el pueblo se manifestó en contra de los policías”, declaró Omar Amela Hernández, quien presenciara el juicio.

Ariel P.

tal vez quieras leer: Denuncian violencia policial contra un menor en Cuba

Comentarios

LO MÁS TRENDING

LO MÁS VISTO