Bernie Sanders anuncia que “correrá para presidente” en el 2020

Bernie Sanders anunció esta mañana que correrá en las primarias demócratas como aspirante a la presidencia y con ello quedó ¿completa? una banda de rivales de Donald Trump para las presidenciales del 2020, entre las que destacan, del otro bando, Kamala Harris, Elizabeth Warren y ahora Bernie Sanders.

Sanders, derrotado por Hillary Clinton en el 2016 – ganó 23 primarias y 1,865 delegados versus 34 victorias primarias de Clinton y 2,842 delegados – busca así, como independiente, llegar una silla que le ha sido esquiva; confiado en que su labor de hormiga durante tantos años ha llegado a su punto de madurez. Algunos especialistas consideran que Sanders cuenta con mayor apoyo del que tuviera hace tres años, y que entre los millenials y “socialistas” su ejemplo de luchador contra el llamado “stablishment” pudiera garantizarle unos cuantos millones de votos.

Sanders, quien se describe así mismo como un socialista demócrata es el décimo “gran candidato” en declarar su candidatura para las elecciones de 2020. Analistas consideran que el interés por derrocar a Trump es tan grande entre sus rivales – demócratas fundamentalmente – que todos los caballos fuertes de batalla se han lanzado al ruedo por ocupar la Casa Blanca, aunque Sanders aclaró este “pormenor” vía correo electrónico.

“Nuestra campaña no se trata solo de derrotar a Donald Trump,“, escribió Sanders en el correo. “No se trata solo de ganar la nominación demócrata y las elecciones generales“, dijo después.

“Nuestra campaña se trata de transformar nuestro país y crear un gobierno basado en los principios de la justicia económica, social, racial y ambiental. Nuestra campaña tiene que ver con asumir los poderosos intereses especiales que dominan nuestra vida económica y política“, explicó más adelante.

“Nuestra campaña trata de redoblar nuestros esfuerzos para acabar con el racismo, el sexismo, la homofobia, el fanatismo religioso y todas las formas de discriminación. Nuestra campaña se trata de crear una democracia vibrante con la mayor participación de votantes de cualquier país importante, mientras que terminamos con la supresión de votantes, los ciudadanos unidos y los niveles escandalosos de gerrymandering“, continuó diciendo en su “comunicado”.

“No deberíamos tener niveles grotescos de desigualdad de riqueza en la que tres multimillonarios poseen más riqueza que la mitad inferior del país“, dijo Sanders párrafos debajo.

“No deberíamos tener una economía en la que decenas de millones de trabajadores ganen salarios de inanición y la mitad de los trabajadores de más edad no tengan ahorros en su jubilación. No deberíamos tener la tasa más alta de pobreza infantil de casi cualquier país importante en la Tierra y un sistema de cuidado infantil disfuncional que sea injusto para los padres que trabajan y para sus hijos“.

En otra parte del texto mediante el cual Sanders explica el porqué de su decisión, y se reveló crítico de Wall Street, las compañías de seguros de salud, las farmacéuticas, la industria de combustibles fósiles, el complejo industrial militar, la industria de prisiones privadas y las corporaciones multinacionales que, según él, ejercen una enorme influencia en las vidas de los estadounidenses; algo que reveló cuando dijo: “me postulo para la presidencia porque necesitamos políticas comerciales que reflejen los intereses de los trabajadores y no las corporaciones multinacionales“.

“Los poderosos intereses especiales en este país tienen un poder increíble y quieren mantener el status quo“, dijo Sanders en su texto.

“Tienen cantidades ilimitadas de dinero para gastar en campañas y cabildeo y tienen una gran influencia sobre los medios de comunicación y los partidos políticos”, expresó y dijo que “necesitamos un presidente que entienda que podemos crear millones de empleos bien remunerados, reconstruir nuestra infraestructura desmoronada y construir las viviendas asequibles que necesitamos desesperadamente“.

Elegido por primera vez a la Cámara de Representantes de los EE. UU. en el 1990, fue electo como senador en el 2006 y ganó su  reelección al Senado en 2018 con un margen de votos de 2 a 1 sobre el republicano Lawrence Zupan.

Sin embargo, Sanders proyecta una imagen tan fuerte que muchos lo ven como un derrocador de ese propio sistema más que un renovador. Y eso preocupa. Y preocupa más que en no pocos “votantes” se vea como un “comunista”.

“Pelear” ahora contra Harris, Warren y cualquier otro que aparezca – ¿Ocasio tal vez? – pudiera demostrarle a “Bernie” si por fin América lo quiere o no, o si quiere o no una mujer para presidente.

Su decisión – postularse o no – llega tras meses de deliberación.

¿Estará a tiempo?