Cuba
WhatsApp: otra herramienta de trabajo para los cubanos
Por Vladia Rosa García
Emprendedores cubanos usan WhatsApp como herramienta de trabajo y aseguran que sus negocios van mejor
Mientras en Cuba no existían datos móviles ni WhatsApp, Messenger era el rey. La mayoría de las personas que lo usaban era porque tenían Internet en los centros laborales o los estudiantes en sus universidades. Chatear era un lujo entre los internautas. No todos podían pagar 2 CUC por cada hora Wi-Fi en un país subdesarrollado, con salarios que oscilaban entre los 300 y 500 pesos cubanos.
Por aquel entonces, la aplicación IMO era la vía más utilizada para comunicarse face to face con los familiares o amigos que estaban en el extranjero. Pocos sabían las verdaderas ventajas del Internet.
En 2017 se convirtió en realidad. Las primeras pruebas realizadas por la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) ante la llegada de la 3G comenzaron en Matanzas, y luego en Villa Clara y Ciego de Ávila hasta llegar al resto de las provincias. En tres ocasiones se anunció una prueba gratis de conectividad que permitiría evaluar las capacidades de la novedosa tecnología.
Así llegaban los datos móviles a la nación y el comienzo de una nueva era. La juventud cubana, influenciada por el desarrollo y las prácticas de vida capitalista, ha encontrado en las redes sociales un medio para ganar dinero. Sobre todos los que pertenecen al sector no estatal.
Dentro de las leyes vigentes en el país existe el derecho al trabajo por cuenta propia plasmado en el Decreto No.356. Asimismo, la Gaceta Oficial emitida en junio del presente año informa que el Estado “ha favorecido a la aparición de nuevas perspectivas creativas, tecnológicas y productivas”.
Odalys tiene 27 años. Su vida se resumía en levantarse a las 8 de la mañana, de lunes a viernes, para ir hasta la Feria Artesanal de 23 y M. Se dedicaba a vender zapatos y prendas de vestir confeccionadas por amistades. Desde que activó por primera vez el paquete de datos ya no sale a la calle. “El Whatsapp es mi ocupación. De eso depende mi capital”. Ella creó un grupo de ventas, en el cual publica los artículos de que dispone para comercializar.
Al principio solo tenía alrededor de 60 personas suscritas, ahora son 200. “Me piden algo que les guste y les mando los modelos y las tallas. Si viven cerca yo misma hago entregas a domicilio, sino vienen a recogerlo hasta mi casa. Así marcha mi empresa, menos desgaste y mayores ganancias”. WhatsApp se ha convertido así para muchos en la principal herramienta de negocios particulares en la isla.
Adrián, encargado de una casa de renta en La Habana Vieja, confirma que el negocio prospera. “Los clientes nos contactan a través del número que aparece en la sección de información en nuestra página de Facebook. Luego le presentamos el local a través de la cámara y en ocasiones los lugares aledaños, para que conozcan el sitio. Esto les da confianza y así no hacen la reserva a ciegas”.
“Una de las mayores ventajas que tiene está en que consume pocos datos. Puedo cargar las fotos con bastante rapidez, me llegan los mensajes al momento y las llamadas tampoco gastan mucho. Son más caras las que se hacen por celular”, testifica. Y agrega que conoce a gente que resuelve los problemas por esta vía. “Por aquí te vistes, conoces de eventos, difundes tu trabajo y lo mejor es que amplías tus horizontes. Al ser una aplicación propagada a nivel mundial, permite visibilidad en mercados foráneos”.
También utilizan WhatsApp los corredores de casa. En conversación con uno de ellos, de La Habana, explica: “Por ejemplo, llego a la casa y se las muestro con imágenes y videos. Los envío al momento para que me digan si les gusta o no, y cerrar el trato en ese instante”. El contacto previo con los clientes lo hace por la app y para él es mucho más seguro que estar buscando en la calle.
Otras modalidades son las promociones de los sitios de reparación tecnológica, venta de equipos o copiadores del Paquete Semanal. Todos usan la aplicación para avisar de las actualizaciones. Frank, uno de los dueños de un sitio con estas características ubicado en 5ta y F, asegura que desde hace cinco meses sus ganancias han subido. “La gente ahora está más al tanto de lo que llega”.
La inventiva del cubano no parece tener fecha de caducidad. Ante los nuevos retos, la población se crece. “Aquí lo que no se puede es parar, hay que seguir para adelante que la cosa está mala”.