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Trump pide mano dura contra revoltosos

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“Mi primer y más alto deber como presidente es defender a nuestro gran país y al pueblo estadounidense. Hice un juramento para defender las leyes de nuestra nación y eso es exactamente lo que haré”, dijo la víspera el presidente Donald Trump.

El presidente Donald Trump prometió ayer lunes devolver el orden a las calles estadounidenses usando el ejército si no se sofoca la violencia generalizada, a la vez que se definió como el “presidente de la ley y el orden’, en un discurso que, como es lógico, fue muy bien recibido por muchos y por otros fue fuertemente criticado.

Con mano dura, mientras que en las afueras de la Casa Blanca dispersaron a los manifestantes con gases lacrimógenos , granadas de destello y balas de goma, Trump pudo dirigirse a la nación en lo que se supone sea un discurso de calma; un llamado a los violentos a quedarse tranquilos.

Trump llamó a las protestas violentas “actos de terror domésticos” y dijo que la policía “dominaría las calles” para sofocar las revueltas. Curiosamente algunas fuerzas policiales en algunos lugares han decidido sumar fuerzas con los protestantes pacíficos para enfrentar a los revoltosos y vándalos.

“Si una ciudad o estado se niega a tomar las medidas necesarias para defender la vida y la propiedad de sus residentes, entonces desplegaré el ejército de los Estados Unidos y resolveré el problema rápidamente”, dijo Trump.

“Mi primer y más alto deber como presidente es defender a nuestro gran país y al pueblo estadounidense”, expresaba minutos más tarde.

“Hice un juramento para defender las leyes de nuestra nación y eso es exactamente lo que haré”, enfatizó.

Trump dijo que se haría justicia para George Floyd, el hombre negro desarmado que murió después de que un oficial de policía blanco se arrodilló en su cuello mientras lo arrestaban. Manifestó asimismo que él, junto con muchos otros estadounidenses, se sintió “asqueado y rebelde” por un video que mostraba el incidente.

Sin embargo, esta es una promesa, porque la verdadera respuesta la tendrá el jurado que decida el destino del policía que, enfrenta hasta ahora cargos por asesinato de tercer grado, y hasta pudiera salir del tribunal con una sentencia bastante leve. Trump puede perdonar un convicto, pero no enviarlo a la cárcel.

Una teleconferencia fuerte contra los gobernadores.

Según un informe de Associated Press que se hizo de un transcripción proporcionada por la oficina del gobernador de Illinois sobre un intercambio entre el gobernador Jay Robert Pritzker y Donald Trump, este último exigió medidas enérgicas más duras y al referirse a él y a todos los gobernadores de los estados expresó: “La mayoría de ustedes son débiles”.

Pritzker le respondió que había que pedir calma.

“Tenemos que pedir una reforma policial. Hemos llamado a nuestra Guardia Nacional y nuestra policía estatal, pero la retórica que está saliendo de la Casa Blanca lo está empeorando. Y tengo que decir que la gente está sintiendo un verdadero dolor y tenemos que tener un liderazgo nacional para pedir calma y asegurarnos de que estamos abordando las preocupaciones de los legítimos manifestantes pacíficos. Eso nos ayudará a poner orden,” expresó el gobernador a lo que Trump respondió:

“OK, bueno, muchas gracias J.B. Tampoco me gusta mucho tu retórica porque la vi con respecto al coronavirus, y tampoco me gusta mucho tu retórica”. Y añadió: “Creo que francamente podrías haber hecho un trabajo mucho mejor. Pero eso está bien. Y sabes, no estamos de acuerdo”.

“Tienes que dominar o parecerán un montón de idiotas, tienen que arrestar y juzgar a las personas”

“Tienes que dominar o parecerán un montón de idiotas, tienen que arrestar y juzgar a las personas”, dijo además el presidente a los gobernadores.

De acuerdo con la versión de la CNN, “Trump parecía enojado y no hizo ningún intento de lograr un tono unificador o introspectivo”.

“Es un movimiento, si no lo dejas de lado, empeorará cada vez más. El único momento en que tiene éxito es cuando eres débil y la mayoría de ustedes son débiles”, insistió.

Trump explicó que “todo el mundo se estaba riendo de Minneapolis por la quema de la estación de policía”, y al referirse al gobernador demócrata de Minnesota, estado donde se encuentra enclavada la ciudad de Minneapolis, dijo que el estado era “el hazmerreír en todo el mundo” por no responder con la suficiente dureza durante la primera noche de protestas.

Jefe de la policía de Houston responde al llamado de fuerza de Trump

El Jefe de la policía de Houston, el inmigrante de origen cubano Arturo Acevedo, el mismo que se hiciera viral por sus imágenes abrazado a manifestantes en esa ciudad de Texas, arremetió contra el discurso de Trump, y le espetó que si no tenía una cosa constructiva qué decir, lo mejor que hacía era callarse la boca.


Acevedo consideró que esta “fuerza” no contribuirá a eliminar el problema que existe en el fondo del asunto, que no es otra cosa que cientos de años de ira acumulada por el racismo.

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