Terminó la guerra entre Apple y Samsung, al menos en Corte

De acuerdo con el diario The Washington Post las guerras de patentes de teléfonos inteligentes finalmente han terminado.

Según el prestigioso diario, Apple y Samsung resolvieron terminar de una vez por todas este miércoles, una pelea legal que ya llevaba siete años en Cortes, poniendo así, ¡por fin!, un capítulo final a lo que The Washington Post llama “el caso más prominente en una serie de demandas por patentes de teléfonos inteligentes en la última década.”

Aunque no se ha divulgado el monto del acuerdo, el rotativo aclara que en mayo de este año, es decir, hace apenas un mes, un jurado había ordenado a Samsung pagarle a Apple nada más y nada menos que la $539 millones de dólares por haber infrigido sus patentes.

Esta ha sido una de las peleas del siglo, que ha tenido en vilo a millones de espectadores desde que en el año 2011 comenzara la batalla entre los dos gigantes tecnológicos. Ese año, fue cuando por primera vez Apple llevó a la corte a Samsung acusándole de “haber copiado” su modelo de Iphone. Apple buscaba no solo ganar la demanda inicial impuesta, cuyo monto ascendía a $2 mil millones de dólares, si no algo mucho más “sustancioso”.

“Al final” – dice Brian J. Love, un profesor de derecho de la Universidad de Santa Clara, en California -, no se logró nada”. “Apple buscaba bloquear los teléfonos Samsung del mercado y no lo logró.”

Los dos líderes de la industria mundial de smartphones estuvieron, como asegura Love, “cerca de una década de litigios, cientos de millones de dólares gastados en abogados”.

De acuerdo con su criterio, “Apple puede encontrar mejores formas de ganar cientos de millones de dólares” en vez de estar desgastándose en una demanda que al parecer no los llevó a dónde ellos querían: sacar a Samsung de la competencia. Aunque Apple lidera aún – en ganancias netas – la industria de teléfonos inteligentes, Samsung y otros fabricantes de teléfonos han mantenido la presión con una gran cuota de mercado, e incluso, han introducido productos verdaderamente innovadores.

Michael A. Carrier, profesor de la Facultad de Derecho de Rutgers , una personalidad que se especializa en el estudio de derecho de patentes, asegura que “Apple ganó en papel, pero fracasó en su objetivo de obtener un producto competitivo.”

El estudioso asegura que este ejemplo, pudiera servir para que otras compañías aprendan de que “el tribunal no siempre es el lugar para tratar de salir adelante”.

Carrier asegura que este caso sentó el precedente legal de que incluso, en el supuesto caso de que una empresa infrigiera el derecho sobre determinada patente, o en algunas, si demuestra que con ello han logrado crear un producto más revolucionador, o al menos innovador, es posible que  los tribunales no bloqueen el producto en el mercado.

“Samsung copió descaradamente nuestro diseño,” dijo a través de un comunicado Apple, en el cual señala que fue esta empresa quien comenzó la revolución de los teléfonos inteligentes con el famoso iPhone.