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Cuba

Repararán equipos de la llamada “Revolución Energética”

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De un lado, la venta de los calentadores solares de agua a altos consumidores de energía eléctrica en el sector residencial; de otro, la reparación de equipos eléctricos de la llamada ‘Revolución Energética’. El gobierno cubano parece estar seriamente preocupado con el ahorro energético en el país, tras el decrecimiento en los envíos de petróleo desde Venezuela.

Las populares ollas eléctricas, calentadores eléctricos, cocinitas eléctricas, y refrigeradores Haier; aquellos equipos que un día pertenecieron a la llamada “Revolución Energética”, serán reparados próximamente en Cuba gracias a la gestión y el accionar de unos grupos compuestos por técnicos “preparados” para realizar reparaciones y dar mantenimiento a los módulos otorgados vivienda a vivienda, por la tropa de los “Trabajadores Sociales”.

Así lo reflejó la Agencia Cubana de Noticias (ACN), la cual dio cuenta de que estas brigadas que devolverán a la vida los equipos de la “Revolución Energética”, ya se encuentran funcionando en al menos tres territorios del país: Matanzas, Pinar del Río y La Habana.

La próxima provincia que le devolverá la vida útil a las cocinas y calentadores – fundamentalmente – vendidos por el Estado cubano, entonces dirigido por el mandatario cubano Fidel Castro, el verdadero gestor de la idea, será precisamente la tierra que vio nacer a este último en el año 1926: Holguín.

Según  la nota de la ACN, que recoge el testimonio de Yosvany Pupo Otero, funcionario del Ministerio de Comercio Interior, “se trata de rescatar la experiencia de años atrás (…) a fin de solucionar aquellas necesidades de roturas de sus equipos electrodomésticos sin necesidad de acudir a los talleres”. El propio Ministerio fue quien anunció en días recientes la habilitación de estas “brigadas de reparación”, que batallarán – ingenio mediante y con los recursos “disponibles en el país” – contra cocinas, ollas, refrigeradores, ventiladores, aires acondicionados y televisores.

Foto: ACN

Está estipulado que las brigadas reciban un reporte, a través de las oficinas municipales del ministerio y los Consejos Populares, en el cual deberá ser elaborado por los propios necesitados – los consumidores – quienes supuestamente incluirán sus nombres en un listado que se hará llegar – muy probablemente – a través del delegado de circunscripción.

Con este listado en la mano, los técnicos deberán acudir al domicilio de los propietarios para revisar el electrodoméstico y realizar un diagnóstico, que certificará “la muerte” del equipo o su posible resucitación, a fin de volver a ser un miembro honorable, pero no caído en combate, de la llamada “Revolución Energética” del nuevo milenio en la isla caribeña.

por Roberto A.

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