¿Regresará el puré de tomate a los mercados cubanos?

Por Vladia Rosa García

Se hace difícil encontrar puré de tomate en las tiendas de Cuba. Otro producto más que desaparece, tras el cigarro, el arroz, los huevos y el pollo

Cuba continúa con la escasez generalizada que llega hasta la cocina de los hogares y se traduce en la ausencia de condimentos, especias, vegetales, verduras, sin mencionar los cárnicos rojos, los pescados, los maricos, esos que desde hace mucho tiempo casi no se saborean.

Durante las primeras semanas de la llamada “situación coyuntural” por la que atraviesa la isla, la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, informaba que el país vivía en total normalidad lo referente al abastecimiento de la mayoría de los productos que necesita la población.

Con los días esta declaración perdía toda la credibilidad mientras comenzaban a desaparecer de las tiendas el cigarro, el arroz, los huevos, el pollo y así sucesivamente hasta que las estanterías daban vergüenza y mostraban claramente la realidad de la crisis.

“La prioridad son los alimentos”, esta frase se hacía eco entre directivos y medios oficialistas de prensa. Pero entre la población se recogían opiniones diferentes. “La cosa está mala. Las neveras están vacías y no parece que vaya a mejorar”, comentaban los ciudadanos cuando se dirigían a cualquier comercio.

Ahora, el problema es con los derivados del tomate: el puré, la vita nuova, las salsas y los jugos, debido al déficit de materias primas presentado en la industria nacional durante el transcurso del año. “Comprar este tipo de productos de marcas extranjeras resulta mucho más caro. En algunos agromercados se encuentra a 20 CUP la botella mientras que en las tiendas de divisas los precios oscilan entre 1.30 a 5 CUC”, aclara Abel.

Con un mínimo cumplimiento del 28 por ciento de la producción, según explicó Osnel Alemán Rodríguez, director general de la Empresa de Conservas, la nación tuvo que importar más de 3000 toneladas de pasta de tomate para suplir industrias básicas y algunos puntos de venta.

“¿Puré? eso está perdido, solo lo encuentras por las TRD. Incluso hay lugares que han aumentado el costo de las pizzas y los espaguetis por lo difícil que les resulta conseguir la salsa”, añade Joan, dependiente de una pequeña cafetería en 25 y H.

En septiembre pasado este producto estuvo en la mira de la prensa oficialista cuando Randy Alonso, director de Cubadebate, denunció su venta exorbitante en el Bodegón Las Terrazas, tienda recaudadora de divisas, y como era Alonso y no otro ciudadano común, fueron despedidas la cajera y la portera.

“Paulatinamente” es el término con el que se refieren al tiempo que tardará la incorporación de estas mercancías en los distintos locales de venta.

¿Cuánto será en realidad? Eso queda a la imaginación. Si se tiene en cuenta, como antecedente, que el reconocimiento del gobierno ante la “situación coyuntural” llegó dos meses después, la solución puede demorar aún. Las notas informativas solo precisan por ahora que los primeros contenedores se enviarán a las provincias de Pinar del Río, La Habana y Matanzas.