Mundial Rusia 2018 Jornada 12: Por poco nos quedamos sin CR7

Irán se desgarró la vestimenta en su partido frente a Portugal, y no solo empató a uno en el resultado global, sino que por centímetros no la derrotó, en un partido que se volvió trepidante en los últimos minutos y que estuvo matizado por el fallo de un penal del astro lusitano Cristiano Ronaldo.

Tras el golazo de Cuaresma en el minuto 40´ del primer tiempo parecía que las aguas tomaban su nivel y que Portugal terminaría primero de grupo pero,… el fútbol tiene sus caprichos.

Si algo debe reprochársele a este equipo iraní es que dejaron todo su ímpetu para los finales, que es precisamente cuando más tiemblan las piernas y se vuelve todo más confuso en la mente.

Taremi tuvo en sus botas una clasificación histórica, y pudo enviar a Portugal, el campeón europeo, de vuelta a casa con Cristiano Ronald incluido, pero falló en el mano a mano ante Rui Patricio. Así las cosas, quienes debieron empacar sus maletas fueron los iraníes, no sin antes dejar una grata sensación en Rusia y “haberle hecho la gracia” a Portugal: enviarlos al segundo escaño del grupo.

Ahora ya están definidos los primeros cruces: Portugal enfrentará a Uruguay, que adereza su favoritismo con su más reciente triunfo ante la local Rusia por 3 a 0 y con el despertar de uno de sus astros goleadores, Cavani.

España, ya no sabe dónde está La Cibeles

La destitución a escasas 48 hrs del comienzo del Mundial del técnico español Julén Lopetegui parece ser que le ha cobrado factura al equipo español ¡y de qué manera! Los ibéricos apenas pudieron arrancarle un empate a Marruecos, una selección evidentemente mucho más débil pero que se plantó bien bonito ante los ibéricos.

Parecía evidente que La Roja enfrentaría a la garra charrúa en Octavos de Final cuando apareció el aspa de un molino: Iago Aspas, con un gol que le dio tranquilidad al rey Juan Carlos, su esposa Leticia, y a toda la nación ibérica. Un gol que contó con la asistencia del VAR.

Por los marroquíes la figura fue Ambarat, un futbolista que “no es de lujo” pero quema todos los kilómetros que quiere en la cancha. Fue una piedra en el zapato para toda la defensa española, que apenas encontró los medios para tenerlo quieto.

Los españoles volvieron a apostar al juego del toque – con diferencias notables al tiqui-taca que les dio el título en Sudáfrica – donde la figura indiscutible fue Isco. El chaval cada día se presenta mejor sobre la cancha, y lo que brindó ayer fue un recital de virtudes.

Hay que ser sinceros: Marruecos, ya eliminado, se dispuso a vender cara su derrota y estuvo a punto de irse con un triunfo histórico de vuelta a casa, pero el mal juicio, la falta de oficio, y el cansancio terminaron por jugarle una carta mala. Mientras España apostó al juego, Marrueco apostó al corretaje y el golpetazo; a intentar sorprender en contragolpe, lo que no pudieron hacer.

El problema de España, pasa por Hierro, indeciso entre Koke, Lucas, Thiago. A su favor hay que explicar lo evidente: él no preparó esta selección, no la conoce a fondo, y con la deuda aún pendiente por parte de Silva y de Carvajal que aún no terminan por brindarle a España lo que ellos de sobra saben hacer, jugar al fútbol, la Roja se desangra. O nos hace sufrir.

Ya están en Octavos. Ahora es que empieza el Mundial para ellos. Y tuvieron “suerte”. Entre uruguayos y rusos, los locales parecen ser el vino que podrán beber de mejor manera.

Rusia, mucho Vodka frente a Uruguay

Por primera vez en este Mundial el equipo de Rusia se vio debajo en el marcador y jamás pudieron encontrar la fórmula sobre la cancha a pesar del apoyo del respetable.

Peor aún: el equipo dirigido por Cherchesov no solo le regaló demasiados balos a un tipo como Suárez, que terminó convirtiendo uno, sino que además terminó convirtiendo un tanto en propia puerta. Porque la verdad sea dicha: Gazinskiy regaló la falta que provocó el gol de Luis Suárez, y el disparo de Laxalt no iba dentro de los tres palos, pero la pierna de Cheryshev desvió el balón y sorprendió a su guardameta. Dos a cero en el minuto 23 parecía – y fue – definitorio.

Lo único que le aportó Rusia al juego fue la genialidad de Cheryshev, y alguna que otra pirueta de Dzuba.

Por fin apareció y definió Cavani, y tras el triunfo avanzó a los octavos de final como primera clasificada del grupo A.