Cuba
Laura de la Uz regresa a Cuba y estas son sus impresiones
No todos los regresos son placenteros y este ha sido uno de ellos para Laura de la Uz, quien ha encontrado un triste panorama en Cuba al volver del viejo continente.
La actriz cubana Laura de la Uz, tras encontrarse una temporada en España, ha vuelto a su terruño natal: La Habana. El retorno esta vez no ha sido un proceso fácil de aceptar, tal como ella misma narra en una pequeña crónica que ha colgado en su cuenta de Instagram.
Aferrada a la encantadora temporada que vivió estos últimos meses en el país ibérico, la destacada intérprete de 50 años regresa a la isla en medio de una profunda crisis que hasta ella misma se ha inspirado en describir, eso sí, desde lo más poético.
Laura comienza su texto contando sobre lo aferrada que estaba a permanecer del otro lado del océano, y nos dibuja una escena equivalente a la de una niña en plena perreta cuando le quitan algo. Luego, el panorama se pone mucho más triste, pero por algún lado hay toques de brillo y optimismo.
“Vengo de regreso en el avión con una perreta interna. 😭La niña que me habita ha estado tirada en el piso de la casa, perretúa perretúa. 😩 Se arrastra por la casa sacando las maletas, se aguanta del marco de la puerta para que no se la lleven, se tira en el piso del aeropuerto de Sevilla y da gritos de “no quiero, no quiero!”, encabeza su texto la prestigiosa actriz.
“Aterriza el avión en Madrid y aumenta la perreta al saber que pese a la nevada y el retraso de los vuelos, nos dará tiempo y alcanzaremos el avión hacia La Habana. 😰 A pesar de que la niña que me habita se resiste y todo a correr por el aeropuerto, llega a la puerta de embarque a tiempo. No le quedan esperanzas a la niña que me habita, ni siquiera podrá retrasar el viaje al menos por un día”, sigue contando.
“Finalmente se monta en el segundo avión fajá con todo el mundo. 😖 Llora llora y cuando no llora, se pone música que la haga llorar más. 😩😭😩Llega a La Habana, cara de tranca fajá, más fajá que nunca, el aeropuerto de La Habana la desespera”, dice y da paso a explicar cómo ha encontrado su ciudad.
Laura cuenta que llega a su casa y aunque la niña a la que hace referencia todavía “está bajo perreta, se encuentra que hay tantas cosas esperándola. La casa vacía, pidiendo amor a gritos, el amigo que le dice: “Qué rico, te tengo cerca!” 🥰Y me trae un cake para celebrar 😍el Día del teatro cubano, un cake malísimo que nos comemos con cariño porque lo que importa no es el sabor ni la calidad del dulce, si no la calidad del amor”, expresa.
“Hay escasez de comida, mucha escasez, pero descubro gente linda y emprendedora haciendo maravillas de la nada. Me encuentro con la nutella cubana 😋y celebro que gracias a eso tengo chocolate y celebro el ingenio y el arte del cubano y de los no cubanos que han venido a aplatanarse en esta isla y aportan y sufren como nosotros. Celebro el emprendimiento cubano, que en medio de todo esto es una luz, una esperanza, un orgullo grande y bueno por mi gente…y la niña que me habita se tranquiliza, se calla, respira finalmente…en el MAR!”, concluye con tono más calmado.
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Tal como muestra en su publicación, Laura volvió a su casa en La Habana en compañía de su esposo, el fotógrafo español Héctor Garrido.
No se sabe con precisión el tiempo que la intérprete llevaba en Europa, pero a juzgar por sus publicaciones en Instagram desde poco después de la cuarentena. El reciente texto, aunque bañado de cierto lirismo y para nada una denuncia, da cuentas de la triste situación en la que está sumergida la isla.
Olivia Pérez
